Cuando fueron seleccionados el pasado 19 de febrero en la First Lego League de Sevilla entre los 30 proyectos mejores de España (de un total de 1.400), no cabían en sí de satisfacción. Acababan de pasar a la fase final nacional del certamen Global Innovation Award, con una solución robotizada al problema de las heces en las vaquerías, un escollo que afecta a los animales y a la calidad de la leche. Ahora acaban de saber que están entre los tres seleccionados del país para medirse en la fase internacional. Concurrirán 120 equipos y los 30 primeros disputarán la final el próximo mes de junio en Washington.

Roboknight, el equipo senior del Club de Ciencia y Tecnología de la Asociación Okola, de Cáceres, no descansa estos días. Capitaneado por Jorge Pozas (15 años) y formado por Aitor González (16), Alejandro Mayoral (14), Adrián Mora (12), Jorge Jiménez (11), Jorge Grajera (10) y Joaquín Avís (10), se esfuerzan en desarrollar y mejorar su prototipo para defenderlo ante el jurado internacional de este certamen, que alienta a los jóvenes a buscar soluciones innovadoras a los problemas del mundo real, trabajando en equipo.

En concreto, los jóvenes cacereños se han centrado en las complicaciones de las vacas lecheras estabuladas en granjas, ya que al sentarse sobre sus heces pueden sufrir infecciones como mastitis o mamitis, y además la leche merma en su calidad. Roboknight ha ideado un sistema robotizado que limpiará estas zonas mediante rampas automatizadas, capaces de retirar los excrementos cuando los detecta un sensor. De hecho, se activa por un acelerómetro ubicado en la cola de las vacas. Tendría un coste asequible (300 euros para cada animal) y una mínima instalación.

A la hora de diseñar su dispositivo, los jóvenes han encontrado las puertas abiertas de las granjas de Jesús Rey, Miguel Patrón y Cooperativa Cooprado, en Casar de Cáceres, y de Alfonso Heras, en Aldeanueva del Camino, así como la disposición de la veterinaria Lidia González Ruibal y expertos de la Politécnica.

Junto a Roboknigth han sido seleccionados los equipos Imperials, de Madrid, con una propuesta de cápsula en las torres para proteger a las aves; y Lauronix, de Vizcaya, con un sistema de seguridad para accidentes con animales en las carreteras por sensores.