Sara Cartoy González, de 42 años, madre de dos hijos de 20 y 17 años, gallega y afincada en Cáceres desde hacía dos años, falleció ayer en torno a las 10.30 horas en el Hospital San Pedro de Alcántara a consecuencia de un politraumatismo cranoencefálico grave ocasionado tras sufrir el lunes por la tarde un brutal atropello mientras paseaba con una amiga por el parque del Príncipe. Un menor, cacereño de 16 años, cuya identidad responde a las iniciales A. V. A. se declaró autor material del hecho. El juez sustituto de la titular del Juzgado de Menores, Jesús María Gómez Flores, decretó su internamiento cerrado en el Centro de Reforma Vicente Marcelo Nessi de Badajoz, además de la privación de la licencia de conducir, que tenía en regla, hasta que concluya el procedimiento.

El joven llegó acompañado por su padre a los juzgados sobre las 14.15 horas, donde prestó declaración ante el juez durante más de una hora. Agentes de la Guardia Civil se encargaron de su traslado a la capital pacense. El auto del juez es una medida cautelar y aún debe celebrarse el juicio, tras el que se le impondrá la preceptiva condena.

Los hechos, que han conmocionado a la ciudad, tuvieron lugar poco antes de las nueve de la noche del lunes. A. V. A., según indica la versión ofrecida por la policía local a este diario, conducía por el interior del parque del Príncipe, en las inmediaciones de la piscina --donde está prohibido circular--. Lo hacía sobre una motocicleta que le había prestado un amigo --la titularidad de la moto tampoco estaba a nombre del amigo sino del padre de éste--. Los testigos aseguran que el joven conducía, "sin casco y a gran velocidad", según consta en el atestado policial.

Sara Cartoy paseaba a esas horas con una amiga, Montaña Prado, y se percataron de la presencia de A. V. A. e incluso comentaron la "excesiva" velocidad del ciclomotor. El joven, tanto en su primera declaración ante la policía como ayer con el juez, aseguró que al ver a las dos mujeres trató de esquivarlas, pero que la rueda trasera de la moto derrapó y no pudo evitar la embestida por la espalda. Sara Cartoy sufrió heridas gravísimas tras el impacto. Montaña Prado corrió mejor suerte: fractura de clavícula y policontusiones; ayer a las 12.30 fue dada de alta.

El atestado policial añade que tras el golpe, A. V. A. dejó el ciclomotor y huyó. Con las dos heridas allí, el dueño de la moto regresó a la zona en busca de la moto. La policía local fue alertada de todo lo ocurrido por una testigo, que avisó desde su teléfono móvil. Hasta la zona acudieron dos ambulancias. Los policías iniciaron entonces una batida para hallar a los jóvenes. Sabían que el presunto autor vestía camiseta negra. Poco después, y gracias a la sagacidad de los agentes, encontraron a los dos muchachos en las inmediaciones de la avenida Rodríguez de Ledesma, donde, al parecer, y sin negar los hechos, les restaron importancia diciendo "que no había pasado nada". Trasladaron entonces a A. V. A. a la jefatura donde, en compañía de su padre, prestó declaración. La policía le interpuso dos denuncias: por omisión de deber del socorro y por circular en zona prohibida; Luego se fue a casa.

Ayer, cuando la policía local supo del fallecimiento de Sara Cartoy, se dio conocimiento de todos los detalles a la fiscalía de menores, se inició el proceso judicial y, en torno a las 13.30, se llamó a declarar al joven. La fiscal de menores pidió al juzgado que a A. V. A. se le aplicara la medida cautelar máxima que contempla la ley: internamiento cerrado del menor durante seis meses en el centro pacense, además de la privación de la licencia. Lo hizo en base a la gravedad de los hechos: un delito de homicidio imprudente, lesiones por imprudencia grave y la omisión del deber del socorro.

El juzgado convocó entonces a las partes a una comparecencia. De un lado, la fiscal, Marta Abellán; de otro. el menor acompañado por su padre y representante legal, y su letrada, Verónica Simón Rincón. Acudió también la entidad pública (Consejería de Bienestar Social de la Junta) y el equipo técnico, formado por un funcionario (encargado de conocer las características del menor: circunstancias familiares y psicosociales del mismo). Escuchadas a todas las partes el juez dictó el auto, a la espera del juicio, tras el que --lógicamente-- se le impondrá la correspondiente pena.

LA ENTRADA A. V. A. entró en el juzgado vestido con vaqueros y camiseta blanca y en aparante estado de tranquilidad. Fuentes de la investigación aseguran que se derrumbó y comenzó a llorar, y que tanto él como su padre "están destrozados". Ante el juez certificó los hechos y dijo que el atropello fue involuntario.

Uno de los matices destacados de la declaración fue que A. V. A. negó la omisión del deber del socorro, y relató que si se marchó del lugar dejando la moto y con las víctimas allí, fue porque quería buscar a sus amigos y llamar por teléfono a su padre. Añadió que su padre también fue al lugar de los hechos y que por la noche ambos se interesaron en el hospital por el estado de salud de las dos mujeres, y que igualmente lo hicieron ayer por la mañana. Las mismas fuentes indicaron que el menor se enteró del fallecimiento de Sara Cartoy cuando llegó a los juzgados. "Están asustados", concluyeron las mismas fuentes.