El empuje y la ilusión tienen un nombre en el mundo taurino cacereño: Angel Méndez, Angelete . Este novillero nacido en 1980 ha puesto todas sus esperanzas en la gran oportunidad que brindará el nuevo empresario a los tres novilleros cacereños el día del patrón. "Espero hacerlo bien para que se me abran más puertas de cara a la temporada", afirma. El año pasado ofreció una buena tarde en la Feria de Mayo, y el día clave le llegó en julio con su debut en Las Ventas, televisado a todo el país. "Era el momento, estaba bien con el toro, pero aquella cornada...", recuerda.

Angelete ha recuperado todas sus ganas y su tesón. Trabaja duro para estar listo (ayer mismo se marchaba a un tentadero), ayudado por el torero cacereño Manolo Bejarano y el banderillero Poli Romero. Tiene un toreo clásico: "Me gusta enganchar a los toros muy adelante, llevarlos muy templados, lo más largo y bonito posible", explica el novillero.

Debutó de luces en agosto de 1995 y con picadores en el 2001. Hasta ahora ha conseguido ser finalista de los bolsines de Coria y de Bougue (Francia), y triunfar en varias novilladas como las de Bayona. Sueña con tomar la alternativa "algún día no muy lejano", pero necesita torear más novilladas y la clave será el 23 de abril. "Ojala salgamos los tres a hombros".