Más días, más espectáculos y más escenarios. El Festival de Teatro Clásico de Cáceres volverá a ofrecer el talento de los eternos dramaturgos, la mejor literatura del Siglo de Oro y de los grandes autores europeos, entre construcciones medievales y palacios renacentistas, una escenografía natural e irrepetible. La XXVIII edición ya tiene fechas, del 15 de junio al 2 de julio, e incluirá en su cartel «lo mejor que se está haciendo ahora en el mundo del teatro, espectáculos desde el siglo XV hasta prácticamente el siglo XVIII, y numerosas actividades paralelas en más emplazamientos», explica la directora del Consorcio Gran Teatro, Silvia González.

Patrimonio teatral y arquitectónico unidos en una combinación realmente atractiva. La programación ya está prácticamente cerrada, y aunque todos los grupos del certamen tienen una calidad contrastada, destaca la participación de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, que el año pasado sobresalió con tres coproducciones en Cáceres. «Es magnífica, nos sentimos muy orgullosos de que actué en nuestro festival, porque le aporta su buen hacer y su prestigio», subraya la directora del consorcio. Respecto a la participación regional, también se representará un montaje que está registrando una acogida especial, ‘El cerco de Numancia’, de Verbo Producciones, «compañía extremeña que gira con este espectáculo maravilloso y que aprovecharemos para que pueda disfrutarse en la emblemática parte antigua», afirma.

El programa completo se presentará a mediados de mayo con todas las obras incluidas en la Escena Clásica o sección oficial del festival. No faltará lo más granado del circuito nacional. «Puedo asegurar que se representarán prácticamente las obras más importantes de este año y del pasado en los escenarios de Cáceres, salvo alguna excepción. Y por supuesto se sumarán nuestras compañías extremeñas, que tienen la capacidad y la categoría suficientes para estar aquí igual que el resto de producciones», afirma la directora. «No podemos traer todo lo que nos gustaría porque no habría presupuesto (el certamen cuenta con unos 200.000 euros), pero estará lo fundamental», matiza.

DIECINUEVE JORNADAS / El programa ganará dos días respecto a la pasada edición y se extenderá durante diecinueve jornadas cargadas de todo tipo de actividades. «Habrá un número mayor de espectáculos este año», anuncia Silvia González. Por ello, además de los grandes escenarios en la plaza de las Veletas (560 localidades) y San Jorge (360), «que son nuestras referencias por estar en el casco histórico, seña de identidad del festival», también habrá representaciones en el Gran Teatro (565) que por su particularidad no se pueden ofrecer al aire libre, y nuevos espacios a lo largo y ancho de la ciudad monumental, «que es maravillosa y merece destacar otros enclaves», afirma Silvia González. Entre ellos estará el Museo de Cáceres, la Concatedral de Santa María o el Foro de los Balbos, donde se realizarán distintas propuestas, además de las instalaciones de la Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD), en el palacio de Luisa de Carvajal (San Jorge) y el Museo Pedrilla.

Todos estos emplazamientos se unirán a los que ya venía utilizando el certamen, como el palacio de Carvajal o la Filmoteca de Extremadura.

No obstante, como ya ha informado este diario, a dos meses del inicio del festival existe un problema con la cesión de San Jorge, el escenario más emblemático para el Consorcio Gran Teatro, ya que el graderío complica sobremanera el paso a la cafetería abierta hace dos años por la Fundación Mercedes Calles, que en la última edición apenas abrió. El ayuntamiento no acaba de dar la autorización para el montaje alegando que, según los informes técnicos, no puede cerrar la cafetería ni imponerle otro acceso. En cualquier caso, las tres partes --ayuntamiento, fundación y consorcio-- han entablado conversaciones para solucionarlo y todas las partes muestran voluntad.

Y es que, según el Consorcio Gran Teatro, «este festival ofrece muchas oportunidades para Cáceres: la gente puede disfrutar del teatro en la calle, que no es fácil ni habitual; pero además aúna las distintas formas de entender a nuestros clásicos para conocer y aprender más del teatro, porque el certamen, además de lúdico, tiene una parte didáctica y comprometida que permite a los ciudadanos profundizar en los espectáculos y los autores», subraya la directora. En general, la cita ofrece un programa para público familiar cargado de actividades (cine, talleres...).

De hecho, según la responsable, «ya no se puede dudar de que éste es uno de los festivales más importantes de la escena clásica del país. De hecho, muchos certámenes miran de reojo al nuestro porque abre la temporada y sirve de referencia para la programación», confiesa la directora. Los propios actores avalan su trascendencia. «Cuando llegan a Cáceres y actúan en sus escenarios naturales, que no los tienen todos los festivales, se quedan impresionados, en general se muestran encantados con Cáceres».

En resumen, el Festival de Teatro Clásico supone un cúmulo de aportaciones para la ciudad, «y además con los años se ha convertido en una de nuestras joyas culturales, en una de las programaciones más antiguas, respetadas y queridas por el público», concluye Silvia González.