El autobús urbano que cubría la Línea 2 el martes por la noche fue objeto de un acto vandálico en la barriada de Espíritu Santo. Cuando el vehículo se encontraba en la parada de la calle Fuerteventura, sobre las 22.00, recibió presuntamente un balinazo que fracturó el cristal de una ventana lateral. "Por el tipo de impacto, los mecánicos creen que pudo ser un balín", explicó el jefe de Administración de la compañía, César Mateos.

En el momento del incidente, el autobús no llevaba pasajeros, lo que evitó algún posible herido, aunque la luna tampoco llegó a despedazarse. El conductor notificó el incidente a la policía local y se ha cursado denuncia, pero se desconoce el lugar desde el que se disparó.

Mateos calificó el suceso como "hecho aislado", por lo que de momento no ha generado preocupación. "Estos incidentes ocurren con mucha frecuencia. En Aldea Moret se han vivido épocas bastante malas en las que nos rompían una media de una luna diaria a pedradas", explicó este responsable. No obstante el vandalismo contra los autobuses son habituales también en otros barrios, desde pintadas hasta la retirada de las publicidades. Ahora la mayor preocupación está en el ferial, por la seguridad de los conductores, como estos denunciaron hace unos días.