El concejal de Festejos, Lázaro García, se mostró ayer a favor de que el 2 de febrero, cuando tradicionalmente se celebraba la romería en los alrededores de la ermita de San Blas, vuelva a ser "medio día festivo". García realizó ayer este comentario durante la celebración de la romería. La parroquia de San Blas puso a la venta nueve mil roscas y a última hora de la tarde "prácticamente ya se habían vendido casi todas", según indicó Antonio Pariente, que es el párroco de San Blas desde hace un año y medio.

"Lo suyo es que --la romería-- se celebrase la tarde del día 2", apuntó Pariente. El párroco admitió que es complicado, pero recordó que esta convocatoria es una de las festividades más arraigadas en Cáceres, una idea con la que coincidió García, que se mostró partidario de "potenciar las fiestas que son populares" y que recordó que la parroquia y la asociación vecinal "me han hecho llegar la iniciativa de que --la tarde del día 2-- sea festiva, con la que estoy de acuerdo".

El ayuntamiento tiene potestad para designar dos días festivos. Hasta hace aproximadamente una década, la tarde de San Blas era una jornada festiva, pero en los últimos años se ha optado por, además de San Jorge, que es una fecha fija, un día de la feria de mayo. No sólo ha perdido San Blas, sino también el carnaval. Para la romería de San Blas se optó, cuando Teodoro Casado era concejal de Festejos, por trasladar su celebración de la tarde del día 2 al primer sábado anterior al 3 de febrero, que es cuando se celebra la festividad del santo. Un cambio que se hizo para garantizar la presencia de cacereños en la romería al dejar de ser festiva la tarde del día 2.

La parroquia, en su boletín del mes de enero, plantea la conveniencia de que esa tarde vuelva a ser festiva. Uno de los argumentos que ofrece es que cuando el consistorio quiere que Cáceres sea capital cultural europea en el 2016 "bueno será recuperar lo que de cultura hay en nuestra tradición y en nuestra historia".

En el boletín también se recuerda, citando los trabajos realizados por Serafín Martín Nieto sobre la ermita de San Blas, que es "una tradición que se remonta casi a los orígenes de la ermita, en el siglo XVI". El párroco defendió ayer que si la romería se sigue celebrando el sábado, solución que también le parece adecuada, "no está mal", dijo, sí sería conveniente que "se diese una mayor publicidad".

MENOS GENTE Aunque las previsiones de la parroquia eran que alrededor de diez mil cacereños pasasen por la romería, se notaba una afluencia inferior a la de otros años, aunque mayor a la del pasado año, cuando a causa de la lluvia "no se vendieron ni la mitad de las siete mil roscas" que se pusieron a la venta, según recordó ayer Pariente.

García apuntó que se está dando publicidad a estas fiestas populares y se refirió a lo que está ocurriendo con la festividad de los Santos Mártires, que se celebra en el paseo Alto y en la que va en aumento la participación. El edil anunció que propondrá ante la comisión de Cultura que la tarde del día 2 sea festiva.