Bien, desvelado el lugar, lo que importa es que la colección de Helga de Alvear vendrá a Cáceres y la ciudad (y por extensión Extremadura) se convertirá en uno de los centros artísticos, salvadas las grandes ciudades, del país. Conviene recordar de nuevo, porque la incredulidad sigue suspendida, el gesto de De Alvear al ceder en depósito su colección (valorada en 70 millones de euros), que resume la creación artística de cuatro décadas e ilumina sobre el futuro del arte. Un gesto negociado, es cierto: ella puso condiciones y se reserva un papel destacado en la gestión del centro. Pero lo que ofrece siempre será de más alcance (de hecho, el depósito es practicamente indefinido) que su contrapartida.

*Periodista.