Desde ayer y hasta el día 15 de agosto, uno de los carriles de la avenida Gil Cordero (en sentido hacia la Cruz de los Caídos) permanecerá cortado al tráfico de 8.00 a 20.00 horas. El motivo es la ocupación de la vía por la empresa Grúas Parra para llevar a cabo unas actuaciones de limpieza de fachada. La restricción de este carril se suma al corte de la arteria principal de la ciudad, la avenida Primo de Rivera, por la construcción del aparcamiento subterráneo.

La primera mañana transcurrió con un notable colapso de la vía al ser esta uno de los accesos alternativos a Primo de Rivera para acceder al centro de la ciudad. Según el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PIMUS) se trata de uno de los ejes más transitados de Cáceres, con 16.357 coches cada día (convirtiéndose en uno de los ejes distribuidores al conectar la N-630 con la avenida de España), sin tener en cuenta el aumento de tráfico derivado del corte de Primo de Rivera. Los ciudadanos comentaron ayer a este diario que la supresión de ese carril provocará atascos sobre todo en horas punta y vecinos con garajes en la avenida señalaron la dificultad de incorporarse a la circulación tras salir del aparcamiento. Además, informaron del aumento notable de ruido durante todo el día.