El gasto de agua durante el mes y medio que se lleva de verano ha bajado a niveles de hace siete años, de los meses de junio y julio de 1999. Pero la situación del abastecimiento a la ciudad, lejos de ser optimista, continúa siendo "preocupante, si baja el nivel --de la cota del embalse de Alcántara--, habrá problemas", aseguró ayer el alcalde en funciones, José Joaquín Rumbo. El pantano del Guadiloba, del que se abastece la ciudad, está al 57% de su capacidad, con agua para casi un año. Pero el dato significativo es el de la cota de Alcántara, que todavía está 12,5 metros por encima de la toma del trasvase del Almonte, aunque ha bajado 5 metros en los últimos dos meses y se prevé que siga descendiendo hasta que en octubre se inicie el año hidrológico.

Rumbo informó de los datos que se han manejando en la última reunión del comité de la sequía, celebrada el miércoles, y lo primero que destacó fue que desde el inicio de la campaña de ahorro, que arrancó hace un año, se ha logrado un descenso significativo en el consumo.

Julio se ha cerrado con un gasto diario de 34,6 millones de litros, mientras que en el mismo mes de los cinco años anteriores se llegó a los 38 millones (2001, 2003 y 2004) y a los 37 (2002 y 2005). Fue el mejor mes de julio desde el 2000, en el que la media también fue de 34 millones.

El dato de 34,7 millones del pasado junio, que habitualmente es el mes con mayor gasto, fue incluso mejor que el de los años 2000 y 1999 y no se daba un resultado más bajo desde 1998, cuando acabó con 31,5 millones.

Estos datos se analizaron en la reunión del comité. Las otras dos cantidades relevantes son la cota de Alcántara, que está en la 206,94 (12,44 metros por encima de las bombas del trasvase del Almonte), y la capacidad del Guadiloba, que está al 57% con 11,6 hectómetros cúbicos, que es lo que consume Cáceres en un año.

GRANDES CONSUMIDORES Entre las medidas para reducir el consumo, Rumbo destacó el inicio de las obras para evitar utilizar agua potable en el riego de parques y las cartas que se han dirigido a los 311 usuarios, de los que 79 son particulares, que gastan más agua para que moderen los consumos, acción que ha sido "efectiva", indicó Rumbo.

El principal inconveniente que tiene el actual sistema de abastecimiento a la ciudad es que el Guadiloba es un pantano con escasas aportaciones, por lo que desde 1992 se depende del trasvase que se hace desde el Almonte, en la cola de Alcántara, al Guadiloba. Ahora se trasvasan diariamente unos 36 millones de litros, un poco más de lo que se consume al día, aunque hay que descontar el agua que se pierde en el Guadiloba por los efectos de la evaporación.

La situación del trasvase no es tan crítica como la del pasado año, cuando durante el verano se mantuvo a un metro por encima de las bombas hasta que en el último fin de semana de septiembre se tuvo que interrumpir la traída de agua desde el Almonte, al igual que ocurrió en marzo del 2005, cuando el trasvase estuvo parado durante un mes. El actual año hidrológico, iniciado en octubre, ha tenido mejores resultados y en abril se llegó en Alcántara a la cota 211, que se ha mantenido prácticamente hasta el mes de junio, cuando empezó a descender.

Rumbo recordó que durante el mes de julio la cota de Alcántara ha bajado una media de 10 centímetros diarios, principalmente como consecuencia de los desembalses de agua en la presa por parte de Iberdrola para la producción de energía eléctrica, mientras que en los primeros días de agosto "está bajando una media de entre cinco y seis centímetros diarios", indicó el alcalde en funciones.