Un nuevo informe de la Guardia Civil desmonta la versión de Jesús Jiménez Silva, acusado de matar presuntamente a su mujer, Tamara Simón (23 años) hace seis meses. Según este nuevo documento, que acaba de recibir el abogado de la familia de la joven, Aurelio Aranda, fue Jiménez Silva quien arrojó a su esposa de la furgoneta cuando circulaban por el carril de la incorporación a la A-66 sentido Sevilla. Como consecuencia del impacto ella recibió un fuerte golpe en la cabeza (la distancia desde la puerta hasta el suelo es de más de un metro). Fue trasladada al hospital San Pedro de Alcántara, donde falleció. Dejó un bebé de casi dos años.

El Instituto Armado confirma que su marido bloqueó la puerta del copiloto impactando el vehículo contra el quitamiedos, para evitar que Tamara pudiera escaparse. Después la cogió y la lanzó a la carretera desde el asiento del conductor. El acusado siempre negó que hubiera chocado el vehículo con algún objeto, pero este nuevo argumento explicaría las marcas que tenía la furgoneta en la puerta delantera derecha.

Falta aún por confirmar si la joven falleció a consecuencia del fuerte impacto o si el acusado la golpeó en la cabeza después de lanzarla del vehículo. Este último extremo se conocerá cuanto el Instituto de Medicina Legal de Cáceres remita el informe definitivo del forense a Madrid, ciudad en la que se instruye el caso al ser el lugar en el que residía el matrimonio.

Ella nació en Navalmoral de la Mata. Ambos se dedicaban a la venta ambulante --tenían un puesto de zapatillas-- y ese día, el 11 de marzo, volvían a la capital de España tras haber trabajado durante toda la mañana en el mercado franco cacereño. Antes del trágico desenlace la pareja había estado discutiendo.

El nuevo informe desmonta la teoría de Jesús Jiménez Silva, que siempre ha sostenido que mantuvieron una discusión en el interior del vehículo, pero que fue ella quien se tiró de la furgoneta en marcha y, a consecuencia de ello, se golpeó en la cabeza. Jiménez Silva está en la cárcel de Valdemoro en prisión provisional, acusado de homicidio --si la autopsia definitiva confirma que Tamara murió a manos de su pareja será imputado por asesinato--.

TENIA UN TOBILLO ROTO Tamara presentaba además el tobillo izquierdo roto. Su marido declaró que él vio que, cuando ella se lanzó de la furgoneta, éste fue el primer pie que apoyó en el suelo. Sin embargo el informe de la Guardia Civil desmiente también este extremo y explica que, por las características del vehículo, desde el asiento del conductor es imposible ver qué pie se ha apoyado en el suelo. Para la Benemérita la joven se rompió el tobillo porque se enganchó en la furgoneta al ofrecer resistencia cuando su marido intentaba tirarla.

Desde el principio la investigación apunta directamente a Jesús Jiménez Silva como autor de la muerte de Tamara. La Fiscalía de Cáceres tampoco creyó en ningún momento la versión del acusado ya que, según el Ministerio Público, el cuerpo de la joven no presentaba síntomas de haber caído de un vehículo en marcha.

Otro de los aspectos que destaca el abogado de la familia de Tamara Simón, Aurelio Aranda, es que su marido no llamó en ningún momento al 112 tras lo sucedido. Fue un testigo quien avisó a los servicios de urgencias tras encontrarse la furgoneta estacionada en la autovía A-66 y a Tamara, aún con vida, sangrando.

El juicio oral tendrá lugar en Madrid, ciudad en la que se instruye el caso. Si se confirmara que Jesús Jiménez Silva mató a golpes a su mujer será juzgado por asesinato por un tribunal del jurado. Por el momento el acusado continúa en prisión provisional sin fianza, donde ingresó días después del accidente.