Cáceres 2016. Descanse en paz. Crónica de una muerte anunciada , reza una pancarta rojo sangre en la sala de conciertos Aldana. Cultura o contracultura para el 2016 , se pregunta otra a modo de precinto en la puerta de la cochera, sobre la que hay un expediente municipal en marcha tras la denuncia de una vecina por los ruidos que causa.
A escasos metros de los carteles instalados por los propietarios de este local de copas y música de la parte antigua, la otra cara de la historia. No al botellón , figura en una de las ventanas de la vivienda de la denunciante, Ana de Luis, una ciudadana de 43 años que se trasladó a vivir, acompañada de su hija, al número 9 de la cuesta de Aldana en agosto pasado y que asegura estar viviendo "dos meses de locura", con la puerta de su casa convertida en un urinario público, amén del ruido que jueves, viernes y sábado soporta hasta las cuatro de la madrugada. Hasta hace unos días, en la fachada de su hogar otra pancarta denunciaba: La casa mudéjar en peligro. Conciertos sin licencia ¿por qué?
A falta de que el ayuntamiento o el juzgado decidan si la sala de conciertos debe cerrar hasta que se adapte desde el punto de vista de la insonorización y la seguridad, la guerra de pancartas ente la vecina y los propietarios del local se visualiza claramente en la ciudad monumental.
El silencio calculado que mantienen los hermanos Marcos, dueños del Aldana, contrasta con la indignación que exterioriza la denunciante. "Son unos sinvergüenzas que hacen negocio con la palabra cultura... las administraciones no deberían haber esperado a que una vecina ´loca´ denunciara la situación", lamenta casi entre lágrimas Ana de Luis, una cauriense que se trasladó a vivir a Cáceres con 9 años y que, tras estudiar Derecho y casarse, fue profesora de español en Alemania durante varios años.
De vuelta a su tierra, asegura que la parte antigua necesita "un patronato que la proteja" y que no merece que sus calles se transformen en un botellón todas las semanas, motivo por el cual estima que no hay más casas habitadas en la zona.
