Las ruinas junto al pozo minero de la Esmeralda acogían hasta el miércoles un cultivo clandestino de marihuana. La Policía Nacional se ha incautado de 25 plantas de cáñamo índico, que tenían instalado incluso un sistema casero pero eficaz de riego por goteo para su cuidado, y ha detenido a un joven de 22 años como su presunto responsable, según confirmaron ayer a este diario fuentes policiales.

La pequeña plantación se encontraba en una de las casetas abandonadas y sin techumbre que hay junto al antiguo pozo del cerro de la Nacional 630. El Grupo Segundo de la Brigada Judicial de la comisaría tenía sometido a una vigilancia selectiva el lugar desde hace semanas, pero hasta el miércoles no interceptó a su presunto responsable cuando acudió a controlar el estado de las macetas.

El detenido, cuya identidad responde a las iniciales E. G. L., tiene antecedentes, aunque ha sido puesto en libertad tras comparecer ante la policía, a la que declaró que la droga estaba destinada para su autoconsumo y no al tráfico. De estas 25 plantas habrían podido extraerse unos 500 gramos de marihuana, cuyo valor en el mercado podría alcanzar los 1.500 euros, según las mismas fuentes.

15 PLANTAS EN LA MEJOSTILLA Esta es la segunda plantación de cáñamo que se halla en la ciudad en menos de un mes. Hace unas semanas la Brigada de Estupefacientes de la Policía Nacional encontró también otro cultivo en condiciones similares en el patio de una vivienda de La Mejostilla. En esta ocasión, se intervinieron 15 plantas.