La Sala de Exposición Permanente es otro de los lugares que ha dejado de tener entrada gratuita. Requiere la misma cantidad para ver los monumentos que son patrimonio de la ciudad, con importancia histórica, artística y anecdótica de la historia cacereña.

Se encuentra ubicada en la plaza de Publio Hurtado, pegada, por su parte posterior, a la muralla de la ciudad. Está construida con mampostería recercada de cantería y su fachada es de los siglos XVII y XVIII. El ordenanza del centro, Sergio Rodríguez, comenta que ha notado un notable descenso de afluencia de público, "desde que cobran la entrada a este edificio multiusos".

La construcción, que data del siglo XVI, ha servido de vivienda particular, de escuela de Magisterio Femenino, de taller de carpintería y de almacén de muebles. En 1991, el ayuntamiento adquirió el edificio para, posteriormente, ubicar en él los objetos recuperados en distintas dependencias municipales para que puedan ser apreciados por cacereños y visitantes.

La sala ofrece en su planta baja exposiciones temporales y varias bóvedas cubiertas, con un aljibe. El patio interior tiene varios recercados de cantería, con una escalera de dos tramos y un pozo con brocal de granito. Desde esta zona, se puede acceder al Adarve de Santa Ana para contemplar una de las vistas más bellas de la ciudad extremeña. En cada una de las dependencias del lugar, el visitante se encuentra como en casa, a la vez que disfruta de las distintas exposiciones.

Un recorrido por las tradiciones, que se quedan en la memoria para siempre y, que enorgullece a todo el que se siente cercano a ellas, dentro del llamado Patrimonio de la Humanidad.