Recurriré». Es lo único que declaró ayer Carmen Heras al conocer la sentencia que la condena a dos años de cárcel y la inhabilita ocho años y seis meses por el caso de los ruidos de La Madrila. Un mes y medio después de que concluyera uno de los juicios más mediáticos de los últimos años, el juez hizo pública ayer su resolución que coincide prácticamente con las peticiones de fiscalía. Según recoge la sentencia, a la que ha tenido acceso EL PERIÓDICO EXTREMADURA, el magistrado considera probado que la que fuera alcaldesa de Cáceres entre 2007 y 2011 cometió un delito continuado de prevaricación medioambiental y le impone una pena de cárcel y le retira la opción a ejercer un cargo público. Por el mismo delito condena el juez a Carlos Jurado, concejal de Seguridad Ciudadana durante su mandato, y le impone una pena de un año y nueve meses de prisión y ocho años y seis meses de inhabilitación para ejercer un cargo público.

En cuanto a los nueve bares de copas imputados, determina penas de mínimo dos años como coautores de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente en su modalidad de contaminación acústica con riesgo para la salud de las personas. Así, condena a dos años y seis meses de cárcel a los responsables de Maquiavelo, Down y Sugar; dos años y cuatro meses a La Bele, Submarino, La cuerda, Barroco y Latinos. Por último, condena a dos años y tres meses de cárcel a los propietarios de Tacones. Los hosteleros deberán indemnizar también a los vecinos con cantidades entre los 2.500 euros y los 10.000 euros en concepto de responsabilidad civil. La cifra que deberán pagar los propietarios por daños morales a los residentes asciende a 99.000 euros.

Emilio Cortés, abogado de Heras, rehusó hacer declaraciones a este diario, pero confirmó que apelarán a la audiencia provincial. Recurrirá el dictamen también la defensa de los hosteleros, que considera «desproporcionada» el dictamen. «Creemos que la condena no es ajustada a unos hechos que ocurrieron en 2011», apela Ángel Luis Aparicio, letrado que defiende a tres locales: Sugar, Submarino y Barroco.

Por su parte, Eugenio Cuadrado, abogado de la acusación encabezada por Cacereños contra el ruido, mostró a este diario su «satisfacción» por el dictamen. «Es una victoria para los vecinos, una primera batalla ganada», añadió. No obstante, instó a la «prudencia» debido a que la sentencia aún no es firme.

El proceso judicial comenzó en 2011 cuando precisamente la Asociación Cacereños Contra el Ruido denunció a los hosteleros, locales, y políticos por los ruidos nocturnos en los locales. En el dictamen el juez cree probado que entre 2007 y 2012 varios informes de la universida y del Seprona determinan que los vecinos estuvieron expuestos a ruidos que superaban «el mínimo permitido». En ese sentido, asevera que tanto Heras como Jurado eran «competentes» de la «la vigilancia del cumplimiento de la regulación en los locales de ocio» y «a pesar de sus obligaciones, actuaron a sabiendas, conjuntamente cada uno dentro de sus competencias» para «no exigir a los locales de ocio que estaban contaminando el cumplimiento de las normas destinadas a impedir que el ruido pusiera en riesgo grave la salud de los vecinos».

ELUDIRÁ LA CÁRCEL // Según fuentes judiciales consultadas por este diario, Heras eludirá la prisión a pesar de la pena impuesta de dos años de cárcel. El artículo 80.3 del Código Penal sobre las penas privativas de libertad expone que «siempre que no se trate de reos habituales, podrá acordarse la suspensión de las penas de prisión que no excedan de dos años» y «la suspensión se condicionará siempre a la reparación del daño o la indemnización del perjuicio conforme a sus posibilidades físicas y económicas». En el caso de Heras, la condena no supera los dos años y carece de antecedentes penales. Si bien es cierto, acumula otra pena por el caso Urban Screens, pero no es firme. Esta sentencia la condena a otros ocho años de inhabilitación también por prevaricación, pero el proceso judicial sigue abierto.

Cabe recordar que Heras recurrió el dictamen al Tribunal Europeo de Derechos Humanos -la Audiencia Provincial y el Tribunal Constitucional desestimaron su recurso de apelación y amparo- y por tanto, hasta que no agote todas las vías judiciales, no consta en su ficha penal. Por este caso, la exalcaldesa de Cáceres Carmen Heras dimitió de su cargo de presidenta del PSOE de Extremadura y tuvo que darse de baja del partido hace un año.

muestras de apoyo // Tras el amago del pasado viernes, la sentencia vio la luz ayer a media mañana y en cuanto se hizo pública, se sucedieron las muestras de apoyo a la que fuera alcaldesa desde 2007 a 2011. Los primeros en pronunciarse fueron sus excompañeros del PSOE, Miguel Ángel Morales y Luis Salaya, que ya se solidarizaron con Heras y asistieron al palacio de justicia la jornada que tuvo que declarar ante el juez como imputada por los ruidos hace unos meses. Tanto el portavoz de los socialistas provinciales como el del PSOE local calificaron la sentencia de «injusta». «Es ilógica, si alguien ha trabajado contra el problema del ruido en Cáceres es Heras», añadió a este diario Morales, que minutos antes se había pronunciado sobre el tema en su red social. A través de redes manifestó también su malestar Salaya y concluyó que la resolución es un «duro golpe». «Heras y Jurado son personas honradas, no robaron nada ni hicieron daño a nadie», lamentó el portavoz del PSOE local. El edil del ayuntamiento Andrés Licerán también se pronunció al respecto y tildóde «barbaridad» la resolución. Por otra parte, el PP local manifestó su «respeto» a las decisiones judiciales y este diario se puso en contacto con Podemos y Ciudadanos que desestimaron hacer declaraciones. Aparte de la representación política, a lo largo de la jornada, amigos de la alcaldesa se solidarizaron e hicieron públicas sus muestras de ánimo a través de las redes. Desde ayer, las partes tendrán diez días para solicitar un recurso de apelación a la Audiencia Provincial para que revise la condena.

Todos los detalles de las sesiones del juicio sobre los ruidos en La Madrila