Marzo será un mes decisivo para el gobierno de Cáceres. Se tienen que tomar decisiones sobre el nuevo plan general de urbanismo, con la adaptación de este documento a las correcciones puestas por la Junta, los aparcamientos de la avenida de España y plaza Marrón, con la aprobación de los pliegos de condiciones para la ejecución de las obras, y los presupuestos municipal del 2009, con un ajuste en los gastos y medidas para recortar la deuda del ayuntamiento. A lo anterior se suma la operación de El Corte Inglés en las Carmelitas, que se tiene que aprobar antes que el nuevo plan de urbanismo. Pero si los plazos no se cumplen y se debe elegir, la alcaldesa, Carmen Heras, aseguró ayer que no parará el nuevo plan para esperar a la operación.

Si el plan se aprueba antes, la operación de El Corte Inglés volvería a retrasarse. Si se espera a que el nuevo plan esté aprobado, ese retraso sería de, como mínimo, medio año. Para que esto no ocurra los promotores de la operación tienen que cumplir en los próximos días los requisitos que ha puesto la Junta. Esta sería la solución más rápida. En el caso contrario, se estudiarían "otras fórmulas" para desbloquearla, concretó Heras sin citar cuáles.

La alcaldesa se reunió ayer por la tarde en Cáceres con el presidente de la Junta, encuentro con el que Guillermo Fernández Vara inauguraba su despacho en la ciudad, está en la planta novena del edificio Múltiples, dentro de su política de acercarse a las poblaciones y de no centralizar todos los contactos en Mérida.

Solo habló Heras tras la reunión, que se prolongó por espacio de media hora. La alcaldesa comentó que no fue un encuentro convocado para la adopción de acuerdos, sino que en la reunión se hizo "un repaso" de los asuntos de más interés que son actualidad en Cáceres. La alcaldesa citó, como ejemplo, cinco de estos asuntos: el nuevo plan de urbanismo, el centro de ocio, los párkings, El Corte Inglés y la Ciudad de la Salud.

La alcaldesa comentó que en la reunión se habló de la necesidad de que en Cáceres se "trabaje mucho en los despachos" con los grupos políticos municipales y con los técnicos "para salvar los obstáculos". En este sentido, la alcaldesa hizo ayer un llamamiento "a la responsabilidad" de todos los grupos políticos.

TRABAJO DE DESPACHO Los dos mensajes enlazan con la situación actual en la que está Cáceres, con un gobierno en minoría que necesita de acuerdos con los otros grupos políticos municipales, además de agilizar las gestiones, para sacar adelante proyectos. El mejor ejemplo de todo esto es lo que está pasando con el nuevo plan de urbanismo y con la operación de El Corte Inglés.

Para sacar la operación se necesita de un acuerdo entre PP y PSOE, al que además se suma el concejal de Foro Ciudadano, Felipe Vela, y que pasa por aprobar la operación como una modificación del plan de urbanismo que está en vigor, por tanto debe tramitarse antes de la aprobación del nuevo plan general de urbanismo que derogará al que está en vigor. Los tres partidos están de acuerdo. Pero la alcaldesa recordó ayer que lo que falta no es el acuerdo político, sino que los promotores de la operación garanticen que cumplirán con las compensaciones exigidas por la legislación del Suelo por los beneficios que obtienen de la recalificación y aumento de edificabilidad en el solar del colegio.

¿En qué consiste esa compensación? en la entrega a la ciudad, a través de su ayuntamiento, de 18.400 metros cuadrados que se destinarán a uso público sin edificar (a espacio libre; por ejemplo, una zona verde). ¿Y por qué 18.400 metros cuadrados? porque es la cantidad que estableció la Junta, que es la que debe dar la aprobación definitiva a la operación de recalificación de usos en la parcela, en base a los estándares que fija la Ley del Suelo para la edificabilidad (el aprovechamiento urbanístico y el lucrativo) de un terreno. Con esta operación, la edificabilidad en la solar de las Carmelitas pasa de menos de diez mil a más de sesenta mil metros cuadrados.

La alcaldesa recordó ayer que "la pelota está en el tejado" de los promotores, que deben comprar esos 18.400 metros cuadrados (es una superficie parecida al terreno de juego de dos campos y medio de fútbol) y a continuación garantizar su puesta a disposición del ayuntamiento. Heras recordó que los promotores trabajaban con varias opciones, habló de tres fincas sin citar su ubicación, que "eran válidas", y comentó que antes de que termine la semana contactará con los promotores "para ver si han resuelto la compra del terreno".

Si para sacar la operación de El Corte Inglés ya hay un acuerdo entre PSOE, PP y FC, para la aprobación del nuevo plan general de urbanismo se depende de otro acuerdo, en el que no participa el PP y en el que entra IU.

Heras precisó que mañana recibirá del equipo redactor el documento del plan ajustado a las condiciones que pactaron PSOE, IU y FC para su aprobación. Este pacto, con el que el nuevo plan de urbanismo cumpliría las condiciones pedidas por la Junta para su aprobación definitiva, obligaba a cambiar los cálculos y las previsiones sobre nuevos terrenos urbanizables. El pacto alcanzado por PSOE. IU y FC recortaba a la mitad las planificaciones que el PP aprobó hace casi dos años. La intención de la alcaldesa es que si el documento que se le entregará mañana "cumple con todas las premisas de PSOE, FC e IU", lo remitirá a la comisión de Urbanismo para su dictamen, por lo que se podría aprobar en un pleno extraordinario de la corporación local a final del mes.

Pero este doble acuerdo (PP, PSOE y FC para El Corte Inglés y PSOE, FC e IU para el nuevo plan) puede quedar invalidado si los promotores de la operación no cierran con la entrega de esos 18.400 metros cuadrados todo el expediente de la intervención de El Corte Inglés, que permita su debate en la comisión municipal de Urbanismo y su aprobación por parte del pleno antes que el nuevo plan. Heras aclaró que no parará el nuevo plan, en tramitación desde 2003, por la operación, aunque confió en una rápida respuesta de los promotores porque aún quedan días.

¿Por qué los dos acuerdos no son compatibles? Si la operación de El Corte Inglés se tramita con el resto del nuevo plan de urbanismo, IU no vota con PSOE y FC este documento. La coalición, que participa en el gobierno de Cáceres, no se opone a El Corte Inglés, pero sí es contrario a una solución que meta en la parcela del colegio viviendas, además del nuevo centro escolar y el almacén. Por su parte, el PP no votaría con PSOE y FC un nuevo plan que deja a la mitad el que los populares aprobaron.

Heras va a dar prioridad al nuevo plan en caso de que los promotores no den a tiempo los 18.400 metros cuadrados. ¿Qué solución habría entonces para El Corte Inglés?, la alcaldesa llegó a comentar que podría darse el caso de que El Corte pudiera no venir en las condiciones que ahora se recogen en la operación, pero a continuación añadió que antes "se buscarían otras fórmulas porque las hay", sin que llegase a concretarlas ni citase otras alternativas como un proyecto de interés regional. La alcaldesa insistió en que se hará "todo lo posible" para que se instale El Corte Inglés en la ciudad, pero recordó que la solución está ahora en manos de los promotores.

CAMBIAR LA UBICACION En la operación participan la congregación de religiosas propietaria del centro escolar, la cadena comercial y la sociedad Estudios Urbanísticos y Medioambientales, que es la que lleva las gestiones ante el ayuntamiento para el cambio de los usos urbanísticos del solar del céntrico colegio.

Sobre la posibilidad de que El Corte Inglés trasladase su proyecto de gran almacén para Cáceres a otra ubicación, la alcaldesa volvió a recordar ayer que el sitio que le interesa a la firma comercial es la parcela del centro escolar porque "está metida en la trama urbana". La cadena "no contempla otra opción", ya que le obligaría a replantearse su proyecto para Cáceres. añadió.