El futuro del bloque C de la calle Ródano sigue en el aire. A falta de los informes técnicos que determinen el estado actual del edificio municipal, la alcaldesa, Carmen Heras, se mostró partidaria ayer de "rehabilitarlo para que el barrio de Aldea Moret pueda utilizarlo", aunque mantuvo abierta la opción de que también se tenga que demoler el inmueble. Para esta decisión aún no se ha concretado una fecha, ya que dependerá de que se complete el realojo de las 13 familias que siguen en el edificio y el desahucio de otras cinco en situación ilegal. Heras apuntó que "no se puede tomar una decisión precipitada porque hay que esperar a ver qué dicen los técnicos" y sugirió la posibilidad de destinar el inmueble a "servicios" para la barriada como sedes para asociaciones o centros del propio ayuntamiento. Reiteró que "es mucho mejor rehabilitar y que, lo que ha sido un lugar sinónimo de pobreza, falta de educación y de trapicheo de drogas, se convierta en un sitio que el propio barrio pueda reutilizar" en el futuro.

Como paso previo para que se pueda vaciar el edificio de la calle Ródano, la alcaldesa recordó que se están reformando viviendas de propiedad municipal en la misma barriada con el objetivo de destinarlas a las familias en situación legal. Hasta que este proceso no acabe, no se podrán llevar a cabo los realojos de los inquilinos, que tendrán que escriturar sus nuevos pisos.