La avenida de Hernán Cortés absorbió ayer más de 12.000 vehículos por el corte de la calle Mira al Río debido a la realización de unas obras de parcheo. La intensidad media diaria en esta vía --número de coches que pasan por un tramo de calle en ambos sentidos de la circulación-- se incrementó en alrededor de 2.000 vehículos, según confirmaron a este diario fuentes de la jefatura de la policía local.

El amplio dispositivo puesto en marcha por el ayuntamiento desde primera hora de la mañana consiguió evitar grandes aglomeraciones y retenciones en las principales vías de la ciudad. Los controles de tráfico se repartieron hasta en seis puntos distintos --plaza de toros, cruces de Pinilla y Empresariales, calle Trujillo y plazas de San Francisco y de Colón--. Para César García, jefe de la policía local, el resultado no pudo ser más satisfactorio: "No hemos registrado excesivos problemas y todo ha salido mejor de lo que esperábamos".

Sin embargo, la asociación de autoescuelas consideró ayer prioritaria la construcción de la ronda este para evitar los atascos en Mira al Río. Este colectivo estimó que las obras de parcheo son "un agravante" y pidió que se hagan en horario nocturno. La actuación en Mira al Río concluyó ayer y hoy la circulación volverá a la normalidad.