La de intentar inculcar a los propietarios de perros el hábito de recoger de la vía pública los excrementos de sus mascotas parece una tarea tan complicada que va camino de convertirse en la historia interminable. En la capital cacereña es cierto que no es costumbre ver a dueños en cuclillas dispuestos a recoger las necesidades de su can, pero no por ello deja de ser una práctica ilegal que incluso conlleva sanciones económicas. Unas multas que deberían ser revisadas al alza, según la opinión de algunos cacereños.

«El parque de El Rodeo está muy sucio porque la gente no recoge nunca las heces de sus perros y los empleados parece que solo barren las hojas caídas», apunta José Manuel, con mascota desde hace muchos años. «Yo llevo mi bolsita y no cuesta ningún trabajo recogerla. La gente no tiene educación y deberían de dar ejemplo. No se puede uno sentar en el césped, la gente mayor se puede caer al pisarlas... Deberían de incrementar las multas», añade este vecino que no pasea a su mascota por El Rodeo precisamente por la falta de higiene que encuentra en la zona verde.

La misma opinión que él tienen también otros cacereños. «Aquí reina el incivismo y falta cultura sobre la tenencia de animales. Si suben las multas verás como la gente aprende por las malas, ya que por las buenas se ve que no están dispuestos a hacerlo», comentó otro vecino que prefiere no revelar su nombre y para quien resulta «muy incómodo pasear por el césped o incluso por los caminos del parque de El Rodeo».

Guillermo es otro de los afectados. Pasea a diario a su mascota también por el parque de El Rodeo y se muestra resignado ante lo que considera falta de educación. «La gente está muy poco concienciada de recoger lo que ensucia y si les llama la atención encima se sienten molestos o simplemente pasan. Este tipo de actos deberían de estar más sancionados, ya que parece ser que es la única forma de que aprenden algunas personas, cuando les tocan el bolsillo», remarcó. Para Guillermo, la escasa vigilancia es uno de los motivos. «Debería haber más patrullas que vigilen este tipo de conductas o, al menos, que en los parques hubiese algún guarda o vigilante que pudiera llamar la atención».

Sanciones

Actualmente, la ordenanza municipal que regula la tenencia y circulación de animales contempla, en su artículo 75, la no recogida de excrementos de la vía pública como una infracción de carácter leve, junto con otras como la posesión de perros no identificados, circular por la calle sin llevar al can atado mediante una correa o la utilización de animales como reclamo publicitario. Todas estas infracciones conllevan una sanción económica que puede oscilar desde los 30,05 a 300,51 euros.

Por su parte, en las consideradas graves (cría y comercialización de animales sin licencia) esa cantidad podría ascender hasta los 1.502,53 euros y en las muy graves (organización de peleas de animales) la multa se situaría entre los 1.502,54 y los 3.005,06 euros.