La mayoría de los hoteleros y hosteleros de la ciudad esperan que Cáceres gane el título de la capitalidad europea como agua de mayo. Saben y están convencidos de que ese logro repercutirá sin duda en sus negocios ya que incrementaría el turismo a gran escala. Reconocen también que la ciudad se haría mucho más grande y ganaría en infraestructuras y en cultura.

"Si somos capital europea de la cultura en 2016 sería lo más grande que ha ocurrido en esta ciudad en toda su historia", se refirió el propietario del Hotel Casa don Fernando, Jesús Bravo.

Sin embargo todos ellos consideran que aún queda un largo camino por recorrer y que es necesario esforzarse por lograrlo incorporando un mayor número de espectáculos culturales y potenciando la ciudad antigua, el patrimonio cultural más importante de los cacereños.

"Hay una competencia grandísima. Ciudades como Córdoba están muy cerca de nosotros y tienen muchos votos. No podemos dormirnos y hay que seguir trabajando para superarlas" indicó Carlos José Márquez, del Mesón Ibérico.