Tras dos años de construcción ya están finalizadas las obras de la nueva iglesia Beato Marcelo Spínola, ubicada en el polígono El Vivero. Dará servicio a los residenciales Los Castellanos, Cabezarrubia y El Vivero y se dirigirá unos 12.000 habitantes. Para hoy está prevista la inauguración oficial del templo y la consagración del altar mayor por parte del obispo en torno a las ocho de la tarde.

El sacerdote Juan Rodríguez se ha encargado de la gestión y organización. La parroquia de Fátima y los donativos de los cacereños han ayudado a la financiación del proyecto. El obispado ha contribuido con un millón de pesetas anuales, igual que la parroquia de Fátima y otras iglesias de la diócesis.

El nuevo edificio, debido al color y su arquitectura, tiene un aspecto innovador. Consta de una capilla auxiliar para ceremonias con poco público, cuatro aulas para reuniones y para impartir catequesis, sacristía, oratorio, coro, salas para niños, servicios adaptados para minusválidos,... Además dispone de un amplio salón de actos que se destinará a conciertos, proyección de vídeos, festivales de villancicos o reuniones. Gran parte del mobiliario ha sido cedido por colegios y otras parroquias. La iglesia dispone en todas las instalaciones de calefacción y aire acondicionado. Se tiene en proyecto poner imágenes en el interior del templo.