Cada día se da más importancia a la estética que rodea las bodas: las flores, los trajes, el coche, la música... "El escenario por supuesto no iba a ser menos, y muchos prefieren un templo del siglo XVI para inmortalizar el momento con el vídeo o las fotos, que una iglesia moderna", señala el sacerdote y sociólogo Jesús Moreno, delegado de medios de comunicación de la Diócesis de Coria-Cáceres, que ha facilitado a este diario unos datos muy llamativos: de las 361 bodas que se celebraron el año pasado en Cáceres, 270 tuvieron lugar en los templos más vetustos del casco antiguo --Santa María, San Mateo, Santiago y San Juan-- y 40 en otra iglesia emblemática por excelencia, el santuario de la patrona, con 40 enlaces en el 2006.

Por tanto, estos cinco recintos acaparan el 86% de las celebraciones frente a los escasos enlaces del resto de las nueve parroquias cacereñas: solo la de Guadalupe llega a la docena, y en otras, como San Eugenio (Aldea Moret) y San Juan Macías (Mejostilla) no hubo una sola boda en todo el 2006 pese al número de jóvenes que viven en ambas zonas.

Aunque Jesús Moreno deja claro que la Iglesia "no pone ningún inconveniente a que se celebre un matrimonio en cualquier templo, aunque aconseja que sea en la propia parroquia", sí lamenta lo que estos datos ponen en evidencia: "La escasa asistencia de los jóvenes católicos a su templo, la falta de convivencia con su comunidad, la pérdida de relación con su iglesia. Por tanto no sienten ningún vínculo a la hora de celebrar uno de los momentos más importantes de su vida, y simplemente eligen el recinto con más estética, el retablo más antiguo para que el acto resulte bonito. Tampoco podemos olvidar que Cáceres, por su historia, ofrece muchas posibilidades en este sentido", indica.

Incluso cuando unos novios demuestran interés por el sentido católico del enlace, también le conceden una especial importancia a la puesta en escena: "Están tensos, nerviosos, por la componente de espectáculo que les envuelve, que han preparado durante meses. Una lástima, porque debería ser una ceremoniaen la que ellos tuvieran mayorprotagonismo, más sencilla yparticipativa”, señala el sacerdote.Otros solo van a misa en celebracionesespeciales y eligen untemplo antiguo donde ni siquieraconocen al cura. “Lamentablementese nota cuando, como sacerdote,te diriges a los novios ya los invitados en plena ceremonia,y nadie responde”. SegúnJesús Moreno, esto queda patenteen detalles como la elecciónde la música: “Dúos o cuartetosclásicos, muybonitos, peroa los que nadieacompaña.Sería más modesto,peromucho másparticipativo,cantar entretodos letras conocidas. Ahora algunasbodas son un teatro, aunqueasí están las cosas y las tenemosque asumir”, reconoce.Queda claro que la mayoríaprefiere casarse en el cascohistórico y la Montaña. La Iglesiacuenta con ello y pone estos templosa disposición de todos, perocon cierto orden. “Generalmenteen otoño se abren los plazos parareservar fecha y hora al añopróximo. Tienen preferencia losmiembros de estas parroquias ydespués se inscribe al resto”, explicael sacerdote. Una parejasiempre suele encontrar un huecopara casarse el año siguiente,“otra cosa es que la mayoríaquiera hacerlo en los mismosmeses y los mismos días, y prefiereesperar para conseguirlo”.Santa María, que no es parroquia,tiene la mayor demandapor su condición de concatedral.La Montaña también presentaotra peculiaridad: los novios debenllevar su propio sacerdote altratarse de una ermita que dependede la cofradía, y que tampocose erige como parroquia.50 EUROS DE ARANCELES Losgastos que supone una boda parala Iglesia se concretan en eldenominado arancel, es decir,los costes de tramitación, aperturade un templo, luces, limpiezay otros aspectos.Está valoradoactualmenteen 50euros, si bienmuchas iglesiasno comunicanel costepara no condicionara las parejas, y prefierendejarlo a la voluntad de los novios.Otras animan a los contrayentesa sentar a un necesitado ala mesa de su banquete de formasimbólica, es decir, aportando elequivalente a un menú (o más siasí lo desean los contrayentes).Santa María es una excepción.Puesto que no está constituidacomo parroquia, y por tanto notiene ningún ingreso, las parejasdeben pagar 240 euros por suenlace para contribuir al mantenimientode la concatedral, sibien Jesús Moreno recuerda quecualquiera puede casarse en otrotemplo. La segunda excepción esla Montaña, propiedad de la cofradía,donde las parejas entregan150 euros por enlace.