OCURRIO al mediodía del viernes en la estación de autobuses. El anciano no quería bajarse de un autobús, por lo que se dio aviso a la policía local que, personada en el lugar, comprobó que se había marchado de una residencia de ancianos porque quería irse a su pueblo, por lo que los agentes avisaron a sus familiares para que lo recogieran.