Tras dos años de obras y 5,7 millones de euros de inversión, la sede cacereña del Parque Científico y Tecnológico de Extremadura, situada en el campus, se dará por finalizada el 12 de abril, fecha en la que se realizará una visita institucional. Desde ese momento, las empresas interesadas podrán tramitar las adaptaciones que necesiten e instalarse en cuanto estén listas.
La demanda es bastante elevada. La software factory de INSA-IBM dejará sus naves provisionales en Capellanías para ocupar la mitad del nuevo centro (2.000 metros cuadrados), donde pretende llegar a los 400 empleados. También están muy avanzadas las negociaciones para que se incorpore la Fundación Cénit con el primer supercomputador extremeño, fabricado por HP a iniciativa de la Junta, que sitúa a la región como referente internacional. Asimismo, tiene casi cerrada su implantación la empresa Infostock Europa de Extremadura, con presencia en distintos puntos del país. Otras firmas negocian su entrada en el centro, según explicó ayer a este diario Antonio Verde, director general del parque.
La sede cacereña completará dicho parque, ya que la pacense se inauguró el lunes. Se trata de una iniciativa de la Junta para potenciar el área de I+D como base fundamental del modelo económico que pretende sortear la crisis. Será una macrosede destinada a empresas innovadoras, de base tecnológica e investigación empresarial, que unirán esfuerzos con la universidad para impulsar nuevas iniciativas. Habrá espacios comunes como salas de reuniones, auditorio, servicio de incubación, asesoría o desarrollo de proyectos.
