Las policías nacional y local en Cáceres investigan desde ayer la desaparición de la caja fuerte, en cuyo interior tenía el arma reglamentaria, del jefe de la Policía Local cacereña, Benedicto Cacho. La caja fuerte estaba en su despacho en la jefatura de la policía.

Cacho estuvo fuera desde el jueves y hasta el lunes y ayer por la mañana, al incorporarse, fue cuando comprobó que no estaba la caja fuerte.

El subdelegado del Gobierno, José Carlos Bote, ha asegurado esta mañana que todas las hipótesis están abiertas y que no se puede adelantar nada. Ha confirmado que se llevaron del despacho la caja fuerte, con el arma dentro, y un cargador. "Esto es raro" fue la primera valoración que hizo el nuevo comisario tras conocer los hechos, según ha comentado Bote.

Cacho tomó posesión del cargo el pasado 1 de febrero. Es agente del cuerpo desde 2005 y accedió al cargo tras aprobar la plaza de inspector, lo que le convierte en el policía de mayor rango y por tanto en responsable de la jefatura.

La policía cuenta con armero en el servicio de atestados de Aldea Moret y en el consistorio, pero no en la jefatura, que está junto a la estación de ferrocarril. Los agentes guardan sus armas en las taquillas.

Una de las reivindicaciones históricas del sindicato CSI-F, también compartida por UGT, que se ha hecho a distintas corporaciones locales, es que la jefatura cuente con un armero y que se cumpla la legislación en materia de Policía Local que establece que se debe contar con un lugar adecuado y seguro para el depósito y custodia del armamento reglamentario.