El primer teniente de alcalde y líder de la coalición Izquierda Unida, Santiago Pavón, se estrenó ayer como alcalde en funciones en ausencia de Carmen Heras, reiterando su tajante oposición a la Operación Corte Inglés . Pavón, que ocupará el despacho de alcaldía hasta el próximo domingo, indicó que si la recalificación de la parcela que ocupa el colegio de Las Carmelitas se aprobara tal como está ahora mismo "supondría un disparate urbanístico". Por eso, el concejal aseguró que su grupo --socio del gobierno socialista-- "pondrá toda la carne en el asador" para evitar que esa operación salga adelante tal como está concebida en la actualidad.

Pavón insistió en que el proyecto actual "colapsa el centro de la ciudad" y conlleva un "apelmazamiento" de su actividad constructiva y social. Pero el concejal fue más allá al asegurar que "quienes votaran esa actuación urbanística harían dejación de funciones, dejarían de defender a los ciudadanos de Cáceres para defender los intereses particulares del promotor de la operación, de los propietarios de los grandes almacenes y de los dueños del solar (en este caso las religiosas carmelitas)".

Para IU se trata de un asunto "absolutamente gravísimo". Tanto es así que si la operación sale adelante en los términos propuestos, el partido "iría al juzgado, e ir al juzgado --apuntó Pavón-- supone una inseguridad jurídica para quienes hicieran inversiones en la parcela".

El concejal recordó la situación que atravesó Saponi (exalcalde del PP) cuando promovió El Corte Inglés. "José María Saponi lo hizo en principio --comentó-- porque creía que era lo mejor para Cáceres, ¿pero cómo se puede poner a José María Saponi a los pies de los caballos, con la dimisión de Rodríguez Cancho, con un mes y pico de polémica, que si esto es un Manhattan, que si esto es un disparate, que si la sombra de Marbella es alargada, para terminar haciendo lo mismo?", se preguntó el edil.

LAS LENTEJAS Pavón señaló que si la ciudad quiere El Corte Inglés "tenemos que hacer humanamente lo necesario para que esté, pero no podemos vender la honra de los cacereños por un plato de lentejas. Eso sería de una vileza tal que acompañaría a los que votaran hasta la muerte". El alcalde en funciones apuntó que "con base jurídica en la mano sostenemos que ahí solo cabe colegio y grandes almacenes", pero no viviendas. "Si el papel lo aguanta todo hoy, las grúas también, pero el desbarajuste que se hace en el centro de la ciudad tenemos que tratar de impedirlo", prosiguió el edil.

Finalmente, Pavón habló de las recientes sentencias por las que el ayuntamiento debe asumir importantes costes económicos y las relacionó con este asunto: "¿Qué está pasando a mi juicio? Pues que la Junta, con la intención seguramente de darle un balón de oxígeno pretendidamente al gobierno y a la alcaldesa, puede estar creando las mismas condiciones de lo que pasa ahora en la sentencia, es decir, que el promotor vaya al juzgado, con posibilidades de ganarla y de tener que pagarle hasta los intereses. Cuidadito, porque no terminamos de escarmentar", avisó el concejal.