Nuevo triunfo de Jairo Miguel el pasado jueves en su segundo viaje a las plazas peruanas, esta vez en la ciudad de Tacabamba, donde en su primer toro logró vuelta al ruedo. El diestro cacereño cortó además orejas y rabo simbólicos a un toro de San Pedro que tuvo entrega por ambos pitones con final de trayecto con mucha emotividad y consiguió salir a hombros. Fue precisamente con el segundo de su lote con el que Jairo confirmó el buen concepto que ha conseguido, que conjunta técnica y gusto, acoplándose y haciendo el toreo a favor.

Toreó en redondo, circulares por ambos pitones y luego se pegó un arrimón. "El toro fue noble --dice desde Perú en declaraciones a este Periódico-- y con transmisión, tuvo bonitas hechuras, acudió al caballo con mucha bravura de largo". Tanto empujó que derribó al caballo. Fue noble, pero cuando pudo le pegó una voltereta. "En el capote pude pegarle una tanda de verónicas rematadas con una media y la voltereta que me pegó fue por tanta entrega", recordó el diestro.

En la corrida se lidiaron toroes de San Pedro en una tarde donde se colgó el cartel de no hay billetes. Junto a Jairo torearon Chihuahua (ovación y vuelta) y Román Collado (vuelta y vuelta tras petición en ambos).

El matador de toros tenía planeada ayer su segunda corrida en Tacabamba tras un buen verano en lo que a tauromaquia se refiere. Ha pasado por Zorita (15 de agosto), Arroyo de la Luz (11 de septiembre) y dos corridas en agosto en la feria de Huamachuco, en Perú, donde en ambos casos salió por la puerta grande.