La Universidad de Extremadura y el Hospital San Pedro de Alcántara acaban de iniciar un proyecto de investigación para disminuir la obesidad severa en los niños cacereños. Los responsables de este estudio son el profesor de la Facultad de Ciencias del Deporte, José Saavedra, y Javier Arroyo, director del Servicio de Pediatría y endocrinólogo. EL PERIODICO habla con Javier Arroyo.

--¿Hay un problema de obesidad infantil en Cáceres?

--Hay una incidencia importante y va en aumento. Cada estudio nuevo que se realiza arroja cifras mayores de niños con obesidad. En este momento un 20% de niños tienen sobrepeso y entre un 12 y un 15% padecen obesidad.

--¿Y qué consecuencias tiene?

--El niño obeso tiene más probabilidades de tener diabetes, artrosis, hipertensión y otras enfermedades.

--¿Por qué aumentan las cifras de obesidad infantil?

--Lo cierto es que nos vamos separando de la dieta mediterránea y se está abusando de la bollería industrial. Muchas cosas que comen los niños son auténticas bombas de calorías .

--Y no se hace ejercicio...

--No se hace. Hay que cambiar la forma de hacer ejercicio en las escuelas. Casi siempre corren más los que menos lo necesitan. Otras culturas tienen integrado el ejercicio como forma de vida. Muchas veces sería suficiente con ir andando al colegio. Pero solo andan los que viven a tres minutos. Los demás van y vienen en coche o autobús. Y en la media hora de recreo no se hace nada.

--¿Qué papel tienen los padres?

--Los padres prefieren que sus hijos coman, sea lo que sea, aunque coman mal. Así, si a los niños les gusta algo, con tal de verles comer, les alimentan a base de eso en detrimento de cosas más saludables. Y luego está el gen ahorrador que es otro factor.

--¿En qué consiste?

--Antes cuando no estaba asegurado comer a diario este gen intervenía ahorrando energía. Pero ahora no hay este problema y el gen sigue actuando.

--Háblenos del proyecto de investigación...

--Se reclutan niños con obesidad y se hacen tres grupos. Al primero solo se le tratará con dieta, al segundo con dieta y ejercicio y al tercero solo ejercicio.

--A primera vista, parece claro que grupo conseguirá mejores resultados...

--Claro, nosotros lanzamos la hipotesis de que la dieta más el ejercicio será la mejor combinación. Una vez corroborada servirá de ejemplo de la necesidad de combinar ejercicio y dieta equilibrada.

--¿A qué niños está dirigida esta investigación?

--A niños de entre 8 y 11 años que tengan un índice de masa corporal elevado. Además, los niños no pueden tener síntomas de pubertad, porque ahí entran otros factores diferentes. Los que combinen ejercicio y dieta o solo ejercicio serán preferentemente de Cáceres. Para los de fuera de la ciudad daremos indicaciones dietéticas a su padres para que las sigan en sus respectivos pueblos.

--¿Cuánto dura el proyecto?

--El proyecto dura dos años pero obtendremos resultados cada seis meses. Empezaremos a principios de noviembre.