El cantante Joaquín Sabina desgranará sobre el escenario del Auditorio de Cáceres a partir de las nueve de esta noche las canciones de su último trabajo, titulado Alivio de luto . Tras cuatro años de silencio discográfico, Sabina ha vuelto a ganarse el favor del público con este nuevo disco, prueba de ello es que las entradas para el concierto de esta noche, patrocinado por Caja Duero, se agotaron a las pocas horas de ponerse a la venta.

A pesar de ello, decenas de cacereños se acercaron ayer hasta la taquilla del Auditorio, pero tras esperar "veinte minutos", según explicó una de las personas que hacían cola, les comunicaron que no quedaba ni una sola a la venta. Esto provocó las quejas de los que esperaban, que criticaron que no se hubiera colocado un cartel para avisar al público que las entradas estaban agotadas. "Nos han dicho que sólo se venden las que estaban reservadas por internet".

Sabina no tiene previsto atender a la prensa y los fotógrafos y cámaras de televisión sólo podrán tomar fotografías y grabar durante tres minutos. Los que sí podrán realizar todas las instantáneas que deseen con sus móviles serán las personas que asistirán al concierto.