El cadáver del turista extremeño Juan Carlos Roncero, de 34 años, asesinado el viernes en Brasil por un grupo de delincuentes, llegará el próximo jueves o viernes a su localidad natal, Moraleja, donde será enterrado, informaron ayer a EFE fuentes familiares. Roncero murió a consecuencia de una disparo en la nuca al intentar resistirse a un grupo de adolescentes que pretendía atracarle, según explicaron fuentes oficiales brasileñas.

Laura Roncero informó de que ningún familiar se ha trasladado a Río de Janeiro y que los trámites para la repatriación del cadáver de su hermano, que trabajaba en Suiza desde hace 15 años, los está llevando una funeraria de Moraleja. Señaló que no tienen nuevos datos sobre las circunstancias de la muerte de su hermano al margen de los que les han llegado a través de los medios de comunicación.

En el momento en que se produjo el atraco, Roncero paseaba con su esposa, de nacionalidad brasileña, y con una pareja de amigos alemanes por el llamado Aterro de Flamengo , un concurrido parque que circunda la Bahía de Guanabara, en la zona sur de Río de Janeiro.

El grupo fue abordado por un grupo de adolescentes, dos de ellos vestidos con uniformes escolares, cerca del museo de Carmen Miranda, en el barrio de Flamengo. Roncero se opuso al asalto y recibió dos disparos en la cabeza.