Las asociaciones juveniles de la ciudad creen que la ordenanza en la que trabaja el ayuntamiento no logrará atajar los problemas que el ocio cacereño viene arrastrando desde hace años, y señalan a los hosteleros como principales responsables de que la situación en la ciudad cambie. Los representantes de los colectivos locales se reunieron con la concejala de Dinamización, María José Casado, para conocer el borrador de la futura norma municipal y del Plan de Juventud. Coinciden en que el problema del ocio en la ciudad es "evidente" y plantean que junto a ambos borradores se articulen otras medidas

Al término del encuentro, los jóvenes lo valoraron como una toma de contacto previa a la presentación de propuestas a ambos temas, y la edil destacó la importancia de que los jóvenes conozcan "los cambios que ls regulación pretende introducir en el ocio", dijo Casado.

PROPUESTAS La postura más crítica fue la del representante de Nuevas Generaciones del PP, Martín Torres, para quien la ordenanza de ocio es solo "una cortina de humo porque el ocio solo lo puede regular la Junta, que es quien tiene la potestad y es con quien deben negociar". Señaló que las propuestas de su colectivo se incorporarán a las del grupo municipal, pero apuntó que "hay que ampliar los horarios" y dijo que la mayoría de locales "no podrán adaptarse".

Por su parte el presidente de ´Mejostilla Joven´, Javier Bonilla, incidió en que la futura ordenanza debe servir "de punto de partida para dar cabida a todos en el ocio", y se refirió a la escasez de alternativas para los menores. "Creo que ayudará pero no solucionará el problema", y añadió: "lo primero es que haya un pacto entre hosteleros y cese el cruce de denuncias que mantienen". Bonilla apuesta por que se dé cabida a una oferta cultural más amplia.

En los mismos términos se expresó David Santos, del colectivo ´T-Entiendo´, que se propuso que el nuevo texto "de cabida al espíritu de la ciudad, de cara a lograr la capitalidad", lo que a su juicio se traduce en que "apostar por un ocio orientado a la cultura, con conciertos y otras actividades en los locales", afirmó Santos. Igualmente, apostó por un cambio de actitud entre los hosteleros, en cuanto a que acometan mejoras en los locales "y que no lo hagan solo para ampliar el horario de cierre", dijo.

Por su parte Esther Martínez, de ´Ruah´, señaló que "la decisión está en los hosteleros, que deben ser responsables en el cambio de licencias". Pidió al ayuntamiento que actúe como "árbitro en las diferencias entre empresarios y vecinos" y a los jóvenes "que den ejemplo". En el mismo sentido, David Navalón, de los ´Scouts´, incidió en que el principal problema "no está en el interior de los locales, sino en el exterior" y pidió que la nueva norma ponga freno a la saturación.