La juez titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Cáceres decretó ayer el ingreso en prisión, comunicada y sin fianza, de Vitan M., de 27 años, el único miembro de la banda de 14 rumanos que aún no había prestado declaración tras ser detenidos en la madrugada del pasado sábado por robar presuntamente entre 2.500 y 3.000 kilos de cable de cobre en una nave industrial del polígono de las Capellanías.
El detenido prestó declaración durante 45 minutos y llegó a los juzgados custodiado por tres agentes de la Policía Nacional, con una visible cojera en su pierna izquierda tras permanecer ingresado cinco días en el hospital San Pedro de Alcántara por una herida de bala que le alcanzó durante la persecución. Hasta el miércoles no fue dado de alta ayer y tiene, según el parte médico, fracturas en el peroné y el cúbito de la pierna y el brazo izquierdos, respectivamente.
Al igual que con los otros tres detenidos que la juez envió a prisión el pasado martes, a Vitan M. se le imputan también dos delitos de robo con fuerza y desobediencia a la autoridad. Los otros diez detenidos para los que decretó la libertad provisional tienen la obligación de comparecer todos los lunes en el juzgado.
Todos los que pasaron a disposición judicial por el robo en Capellanías tienen antecedentes y son expertos en robos. La policía ha confirmado también que están reclamados por juzgados de otras ciudades por hechos similares. Son de nacionalidad rumana y tienen edades comprendidas entre los 18 y 46 años.
