A más de un año de prisión se enfrenta un cacereño al que se acusa de quebrantar la orden de alejamiento de su exesposa que hace menos de un año le impuso un juez. Fue el titular del Juzgado número 4 el que instruyó el caso de Lázaro L. S., acusado de un delito de maltrato contra su exesposa, y le impuso, con fecha 10 de septiembre del 2004, la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio.

En el Juzgado de lo Penal será ahora juzgado por dos presuntos delitos continuados de quebrantamiento de medidas, por cada uno de los cuales pide el fiscal para él siete meses de prisión. Al parecer, el acusado, pese a la medida de alejamiento impuesta, "ha llamado a su exesposa en múltiples ocasiones", y la "ha insultado y amenazado", recoge el fiscal en su calificación provisional.