La fortuna les sonrió a principios del 2007 cuando les tocó por sorteo un piso de 60.000 euros, todo un chollo a la vista de los precios del mercado inmobiliario, pero desde entonces esos adjudictarios llevan cuatro años sin ver un solo ladrillo, y ahora se confirma que tendrán que esperar todavía más. La promoción de 105 pisos adjudicada a Provivesa en la manzana 3 de la nueva urbanización Sierra de San Pedro (Río Tinto) no ha podido desarrollarse durante todo este tiempo por falta de préstamos bancarios. La Junta de Extremadura ha optado finalmente por pedir la reversión de los terrenos para hacerse cargo de la situación, según ha comunicado la Consejería de Fomento a El Periódico EXTREMADURA.

No es el único caso. La Administración regional también tuvo que intervenir en 2009 en otra promoción del Plan 60.000 de Provivesa con 180 pisos en el Junquillo, por un problema similar. En aquella ocasión, Urvipexsa, empresa pública de la Junta, se encargó directamente de sacar adelante el proyecto y el inmueble está actualmente en obras. La constructora Shayver tampoco fue capaz de encontrar crédito para 260 viviendas del mismo programa en el Junquillo, y el año pasado traspasó la operación a Magenta, que sigue trabajando para lograr financiación bancaria e iniciar la obra.

En concreto, la promoción de Provivesa en la manzana 3 de Río Tinto se sorteó en febrero de 2007, y en noviembre de ese año se firmaron los contratos entre empresa y adjudicatarios, que pagaron 1.000 euros en concepto de reserva e inicio de obra. Pero las conversaciones con bancos y cajas nunca llegaron a buen puerto dada la situación financiera. Al no iniciarse la construcción, la Consejería de Fomento anunció el pasado octubre su intención de pedir la reversión del terreno, que ya ha comenzado a ejecutarse. Basta decir que otras viviendas del Plan 60.000 sorteadas con posterioridad están a día de hoy finalizadas y habitadas.

La reversión requiere un procedimiento jurídico con diversos trámites, por eso no será automática. Cuando el proceso esté más avanzado, la consejería decidirá cuál de las dos posibles alternativas toma para desarrollar los 105 pisos pendientes. La primera consiste en adjudicarlos a otra promotora privada, que tendría que buscar financiación y acometer la obra. La segunda sería asignarlos directamente a la empresa pública Urvipexsa (como ya se ha hecho en el Junquillo), que muy posiblemente tendría más fácil lograr un aval para levantar el inmueble, y posteriormente encargaría la edificación a una constructora.

Pese a la crisis y los problemas de financiación, "lo que está claro es que todas las viviendas del Plan 60.000 prometidas y comprometidas por la Junta se harán", afirman fuentes de la consejería, que también aseguran que los trámites "se agilizarán todo lo posible" dada la espera de los futuros inquilinos.

MAS VIVIENDAS PENDIENTES En la capital cacereña hay 762 pisos del Plan 60.000 en distintas fases que aún no han sido entregados a sus adjudicatarios. Magenta busca financiación para los 260 del Junquillo sorteados en abril de 2007, como ya se explicó anteriormente. Sin embargo, las 110 viviendas de Gestyona en la manzana 1 de Río Tinto ya tienen crédito y recibieron la licencia de obras hace una semana, de modo que este mes comenzará el movimiento de tierras, según explica el director general, Juan Carlos Cotallo. También se ha convocado a los adjudicatarios a firmar los contratos definitivos a partir del 27 de enero. Estas familias no tendrán que esperar tanto, porque el sorteo se celebró el pasado junio.

Ya están en obras otras promociones: las 180 viviendas asumidas por Urvipexsa en el Junquillo y las 260 de Ferrovial en la misma zona, que fueron sorteadas en 2007 y que también han resuelto sus problemas de financiación.

El bloque más en ciernes es el de Sierra Calama en Río Tinto, con 212 viviendas. Aún no se ha celebrado el sorteo, de modo que no hay adjudicatarios y la presión para poner marcha los trámites también es menor.