La prohibición de que los no residentes no aparquen en el casco viejo no evita que se llene de coches. La primera medida del gobierno municipal para restringir el tráfico intramuros que comenzó a aplicarse ayer puso de manifiesto que se queda corta para lograr una parte antigua limpia de vehículos.

Con este objetivo, el ayuntamiento anunció que también está dispuesto a reducir las horas de reparto --establecidas ahora de 7 a 12 de la mañana-- para eliminar vehículos de la vista de turistas y vecinos. Será la siguiente medida de envergadura que ejecutará la concejalía de Movilidad Urbana tras intentar impedir en primer lugar que los coches de los que no viven en la ciudad monumental estacionen, aunque ya dispongan de una tarjeta de acceso.

Aunque Valentín Pacheco, concejal del área, aseguró que ya había dado orden de multar, ayer no se sancionó a ningún conductor porque los agentes de la policía local se limitaron a tomar nota de las matrículas de los vehículos aparcados para cotejar si sus dueños residen en la zona. Pacheco dejó claro que, si se comprueba que viven en otro barrio, se les retirará el permiso. En opinión del concejal, solo debe estar permitido aparcar a los que residan, excluyendo también a los trabajadores de instituciones y organismos con sede en la ciudad monumental. Solo con este epígrafe hay 175 autorizaciones concedidas, según los datos de Pacheco. El PSOE maneja una cifra similar, 152. El concejal no encontró ayer explicaciones a que se hubiera concedida una cantidad tan alta.

La recogida de datos de matrículas continuará como mínimo hasta mañana. A partir del jueves, todo vehículo que no sea de un vecino será multado. Pacheco recordó que la sanción está estipulada en 200 euros. En cualquier caso, el ayuntamiento reconoce que el proceso de actualización llevará tiempo, ya que hay casos de vecinos que no han comunicado aún los nuevos datos si cambiaron de vehículo.

En cuanto a la reducción del horario de carga y descarga, Pacheco avanzó que tiene previsto recabar informes jurídicos para reformar la ordenanza municipal que la regula. Aseguró que planteará la medida al resto de grupos políticos y se mostró partidario de adelantar a las seis de la mañana la autorización para que el reparto inicie su trabajo.

El concejal consideró "excesivo" que ahora disponga de cinco horas para poder circular intramuros y apuntó que "no puede ser que a las 11 o las 12 de la mañana" siga habiendo vehículos en el casco histórico. Como contrapartida, planteó flexibilizar los horarios del reparto en otras zonas de la capital.