La carrera de violador de Elías Palomo, nacido en Plasencia el 11 de abril de 1956, se inició cuando tenía 26 años. Fue acusado de violar a una mujer, y el 17 de junio de 1982 se le condenó a 12 años y un día de prisión.

Ocho años después de cometer su primera violación reincidió. Tenía 34 años, y su víctima fue su propia hija, de tan sólo 12 años y de la que abusó reiteradamente. El hecho se descubrió en febrero de 1990, cuando la niña quedó embarazada. El 17 de diciembre de 1990 la Audiencia le condenó a 18 años y 4 meses de cárcel.

Tras cumplir 10 años de la condena anterior, volvió a intentarlo con su cuñada y, por una violación en grado de tentativa, se le ha condenado a seis años.