Laureano León dirige desde ayer el PP de Cáceres. El nuevo presidente provincial nació en Badajoz en 1966, se crió en Castuera, y desde los 9 años reside en la capital cacereña. Es parlamentario autonómico desde 1991, y en esta legislatura es vicepresidente segundo de la Asamblea. Sus primeras palabras se las dedicó a su antecesor en el cargo, Angel Carlos Bernáldez, quien recientemente ha fallecido. "No es la manera deseada de asumir la representación del Partido Popular en la provincia", manifestó León, quien calificó a Bernáldez de "un amigo, con el que he pasado innumerables momentos tanto políticos como personales".

Laureano León estaba acompañado por el presidente regional del PP, Carlos Floriano, y el vicepresidente provincial de los populares, el alcalde cacereño José María Saponi, cuando ayer por la tarde se informó de su nombramiento. Su trayectoria política ha estado muy unida a la de Carlos Floriano desde que coincidieron en el directiva de NN GG de Extremadura, y fue Saponi quien ayer, como vicepresidente, propuso la designación de León ante el comité ejecutivo provincial, una solicitud que fue refrendada por este órgano y por la junta directiva provincial.

Las elecciones generales de marzo son el primer reto al que se tendrá que enfrentar el nuevo presidente provincial. Su objetivo será repetir el resultado de las comicios del 2000, cuando el PP ganó al PSOE en la provincia cacereña en número de votos. Lo que no podrá igualar el PP son los tres diputados logrados hace cuatro años, ya que la provincia de Cáceres perderá un representante (se pasará de cinco a cuatro escaños). En las elecciones al Congreso el desenlace más probable será un reparto de diputados entre populares y socialistas.

Sobre la presencia de Saponi en las candidaturas al Congreso o al Senado, León dijo que no se empezará a hablar de listas hasta que se convoquen las elecciones y se disuelvan las Cortes. La pérdida de un escaño en la provincia y las dificultades para desequilibrar el esperado empate con el PSOE reduciría las posibilidades de que en la candidatura cacereña vaya uno de los ministros que ahora no son diputados y que el PP quiere poner al frente de listas al Congreso. La presencia de un alto cargo del Gobierno para lograr mayor número de votos tendría poco sentido en la provincia de Cáceres, donde el empate es casi seguro.

TRABAJO DEMOSTRADO León destacó el reto de las elecciones autonómicas y locales del 2007, en las que habrá que poner "todos los esfuerzos" y "estar muy cerca de los problemas de los cacereños y de todos sus pueblos".

Floriano y Saponi resaltaron las cualidades de León para dirigir el PP. "Su eficacia y trabajo están demostrados", subrayó Floriano. Saponi indicó que propuso su nombramiento porque "las consultas hechas me llevaban al mismo nombre". "Es un hombre de centro y liberal, con experiencia suficiente y una capacidad de trabajo espléndida", añadió.