Dicen que los niños tienen una sensibilidad especial hacia los animales y la naturaleza. Ellos no son el futuro. Ellos ya son el presente: auténticos ejemplos de lo que se debe hacer bien, y cómo hacerlo. Consciente de esta realidad, la Asociación Cacereña para la Protección y Defensa de los Animales ha impartido 30 charlas durante 2017 a más de 700 alumnos de Cáceres y otras poblaciones. Objetivo: proporcionar a los animales una vida digna, libre de maltrato, crueldad o desprecio. Y ojo, porque esta educación también comienza a demostrar su eficacia contra el acoso escolar.

Los voluntarios de la protectora trasladan a colegios e institutos su experiencia de 24 años al cuidado de los animales. Incluso llevan a las clases algunos de sus perros especialmente tranquilos para reforzar sus enseñanzas. Los alumnos se entregan al momento, entre caricias, juegos, proyecciones, actividades didácticas y consejos prácticos. «Los niños y jóvenes son la base de todo: si las actitudes éticas y cívicas se orientan desde la primera infancia, muchos de los actuales problemas pueden erradicarse», explica Juana García, presidenta del colectivo.

Durante las charlas se informa y sensibiliza a los niños sobre varios aspectos: los beneficios físicos y mentales que procuran las mascotas (despiertan valores de empatía, justicia y compasión), los lugares adecuados para pasearlas, qué hacer con sus deposiciones, la necesidad de controlar las camadas... «Pretendemos que los escolares no solo sean espectadores, sino que lleven a sus casas todo lo aprendido y colaboren en mejorar el mundo en el que viven», subraya la presidenta.

Además, los programas de respeto a los animales están demostrando una influencia efectiva contra el acoso y la violencia escolar, ya que mejoran la empatía, ayudan a ponerse en el lugar del otro, trabajan sentimientos como la indefensión, y refuerzan la autoestima y la toma de decisiones.

Y es que la Asociación Cacereña para la Protección y Defensa de los Animales lleva veintiún años como garante del cumplimiento de las leyes de protección animal, trabajando en la recogida, recuperación y puesta en adopción de perros y gatos abandonados. Según ha informado en su reciente asamblea ordinaria de socios, durante 2017 tramitó 33 denuncias por venta ilegal de animales ante la Agencia Tributaria, y otras 13 denuncias ante el Seprona y diferentes administraciones por casos de maltrato, desde animales en mal estado hasta riesgo por cables del tendido eléctrico para las cigüeñas, fotos en redes sociales, negocios que utilizan animales como reclamo publicitario...

Además, la protectora está a la espera de que el Ayuntamiento de Cáceres le conceda la licencia de obras para iniciar la construcción de un albergue donde cuidar de animales abandonados, que lleva un año en trámites. Ya dispone de un terreno propio, de 55.000 metros cuadrados, junto a la Ex-100. El colectivo hace un llamamiento a la ciudadanía para que se sume como socio y/o voluntario a sus iniciativas (charlas, cuidados de animales...), que siempre necesitan más manos.