La línea nocturna entre la Cruz de los Caídos y el recinto ferial será reforzada desde el próximo fin de semana para paliar las aglomeraciones que se forman alrededor de los últimos autobuses, con abucheos y algunas situaciones de tensión que también han afectado a los taxistas. El concejal de Seguridad Ciudadana, Santos Parra, se reunió ayer con la empresa concesionaria del transporte público en Cáceres, Busursa, y acordaron ampliar el servicio de los sábados en treinta minutos, concretamente hasta las seis y media de la madrugada, con dos autobuses que saldrán del ferial a las 06.15 y a las 06.30 horas.
El éxito alcanzado por la pista abierta en el hípico y los habituales botellones del ferial han atraído a miles de jóvenes a la zona a lo largo de este verano. El servicio de autobús al centro finalizaba a las seis de la mañana y en los días de mayor afluencia dejaba a cientos de personas en tierra . Durante el último fin de semana de agosto se produjeron incidentes, debido a los insultos y golpes contra los taxis por parte de algunos de los 3.000 jóvenes que se quedaron en el ferial y que peleaban por los pocos vehículos disponibles, para no tener que caminar cuatro kilómetros hasta la ciudad.
"Esta misma mañana hemos acordado la ampliación con el gerente de Busursa. Se pondrá en marcha el sábado", declaró ayer el concejal Santos Parra. El refuerzo no podrá realizarse los jueves ni los viernes debido a que todas las líneas diurnas de autobuses comienzan a funcionar a partir de las siete de la mañana, y no daría tiempo a limpiar debidamente los vehículos. "En cambio, el domingo solo circulan algunos autobuses y por tanto resulta factible", explicó Santos Parra. En cualquier caso, el mayor número de usuarios suele registrarse durante esa madrugada.
Responsables de la compañía Busursa declararon ayer a este periódico que no hay ningún problema para iniciar el nuevo horario, pero recordaron que la mayoría de los jóvenes apuran la noche y quieren regresar a la vez en los últimos autobuses. "Resulta imposible trasladarlos al mismo tiempo, tendríamos que utilizar todos nuestros vehículos y eso no podría ser. La vuelta debería hacerse de una forma más escalonada", advirtieron. De hecho, salvo al final, los vehículos solo llevan entre veinte y treinta viajeros durante la madrugada.
GAMBERRADAS Además, el personal de Busursa asegura que continúan las gamberradas en los autobuses nocturnos. "Se aglomeran en el acceso, abren las puertas de atrás para intentar subir, también las abren en los semáforos para bajarse donde quieren, van llamando la atención todo el trayecto... Es un verdadero problema, está comunicado al ayuntamiento y de hecho hay policías locales en el recinto, pero claro, si quieren subir 500 personas a la vez a un autobús no sabemos cómo se puede solucionar", indican.
