Las pintadas en el mobiliario urbano del parque es uno de los asuntos que más preocupa y enfurece a los vecinos de Llopis Ivorra, barrio en el que se encuentra la cueva de Maltravieso. El ayuntamiento lo abrió hace ya seis años para disfrute de los residentes de la barriada, sin embargo, desde su apertura no han cesado las críticas por la falta de mantenimiento y seguridad en la zona.

Según explican los usuarios del mismo, el espacio está abierto a diario y allí se cuelan jóvenes que llevan a cabo "gamberradas" como grafitis y destrozos de todo lo que encuentran a su alcance. Aseguran que, a pesar de que el enclave de Maltravieso se encuentra vigilado por un guarda de seguridad que vive allí, no es suficiente. Por lo que exigen al ayuntamiento que tome medidas y que controle más este espacio tan importante para la ciudad.

La parte superior del parque es la más deteriorada. En ella hay un espacio sin ajardinar por lo que la maleza ha crecido sin escrúpulos llegando a ocupar la acera por la que los ciudadanos pasean. Según explican los residentes de Llopis Ivorra, el mal estado ha empeorado con las lluvias que han caído en la ciudad en invierno, algo que confirmó además el ayuntamiento, cuyo responsable de Infraestructuras, Miguel López, aseguró que una vez terminara el mal tiempo se adecentaría toda la zona verde.

Por otro lado, y según explicó el secretario de la asociación de vecinos de Charca Musia, Luis Casillas, los residentes en su barriada están molestos porque se ha cerrado la entrada por la que los vecinos del barrio accedían al parque del yacimiento arquelógico. Y es que la zona de la cueva de Maltravieso y el centro de interpretación es un lugar de paseo habitual para los residentes de Charca Musia por su cercanía.