Cáceres cuenta con una planta de tratamiento del agua para su potabilización (situada en la Montaña) y con una gran planta de depuración de agua residual (en la carretera de Torrejón), además, a causa de la orografía de la ciudad, hay tres pequeñas plantas de residuales en la cuenca oeste (carretera de Malpartida, Capellanías y Aldea Moret), operativas desde 2002. El concejal delegado de Infraestructuras volvió a reiterar que ninguna de las tres sirve, "no han funcionado nunca", afirmó, "es una obra fallida", añadió.

Las tres depuradoras se diseñaron para dar un servicio a un máximo de 15.000 habitantes y la inversión, con cargo a fondos europeos, fue de 2,5 millones. El primer inconveniente que surgió con estas instalaciones fue por su mantenimiento, además fue necesario un proyecto reformado.

]López ha repetido en varias ocasiones que no han cumplido con el fin para el que se hicieron. Se depura, pero no con todos los parámetros exigidos, "salvo contadas ocasiones", añadió. De momento el ayuntamiento tiene una moratoria de la Confederación del Tajo, por lo que se trabaja en su inclusión en el plan de calidad del agua para que con fondos de Medio Ambiente o de la Junta se haga una obra nueva.