Los vendedores ambulantes condenaron ayer las amenazas a la alcaldesa, Elena Nevado, y al concejal delegado de mercado, Jorge Carrasco. "Condenamos las amenazas, están fuera de lo que supone el mercadillo de Cáceres. Siempre hemos defendido una protesta pacífica. Reivindicamos lo que queremos, pero sin amenazas", dijo a este diario el comerciante, Emilio Santos. Y añadió que "están fuera de lugar y nos hace un flaco favor a los ambulantes".