Autovías por chabolas. La recuperación de zonas degradadas en Madrid tiene un buen ejemplo en el núcleo chabolista de Pitis, en el distrito de Fuencarral-El Pardo. La actuación de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo logró concluir en el 2004 el derribo de 170 construcciones ilegales y el realojo de 106 familias, la mayoría de ellas de origen portugués.

Enclavado al norte de la M-40 y con más de 20 años de antigüedad, la transformación de este poblado en una nueva zona se hace visible a vista de pájaro. El enjambre de chabolas ha desaparecido y sobre ellas se han levantado nuevos accesos al cinturón madrileño. Aunque fueron necesarios cuatro años para poder realojar a todos los ocupantes del poblado, Pitis ha logrado recuperar el suelo para otros usos.

Entre sus antiguos vecinos, dedicados principalmente a la recogida de chatarra, figuraban los que no cumplían con los requisitos para ser adjudicatarios de viviendas, desalojados por orden judicial. Según el informe remitido a este diario por el ayuntamiento madrileño, "esta laboriosa intervención está dando resultados positivos, ya que el nivel de conflictividad vecinal de las familias realojadas es inexistente y la integración muy positiva".