El portavoz del Partido Popular en la Diputación Provincial de Cáceres, Fernando Manzano, pidió ayer a la consejera de Bienestar Social, Leonor Flores, que la Junta de Extremadura ofrezca a los trabajadores del centro de acogida de menores Julián Murillo la posibilidad de pasar a depender del gobierno regional o quedarse en la diputación en caso de que se rompa el convenio entre ambas instituciones a finales de esta legislatura.

Manzano estimó que el gobierno regional debería actuar, dijo, de la misma manera que hizo cuando cesó el convenio con la Diputación de Badajoz en el centro San Juan Bautista, "a cuyos trabajadores sí se les ofreció ambas opciones", resaltó el portavoz provincial del PP.

A juicio de Manzano, los empleados del centro de menores de Cáceres tienen "una gran profesionalidad, algunos acumulada desde hace 24 años". Por eso, insistió, "la consejera debería recapacitar antes de adoptar cualquier decisión".

Manzano, que compareció ayer ante la prensa, aprovechó para criticar la actitud de Leonor Flores. "Hace un año, cuando visitó el Julián Murillo lo definió como modélico, incluso se realizaron obras. No entendemos que ahora diga que hay construir uno nuevo", apuntó el responsable de la oposición.