"Womad desde dentro es una gran familia. Aquí hay un feeling increíble. Somos gente enamorada de la música y de esta ciudad. La gente de Womad está encantada de venir" comenta Ignacio Vela, un cacereño del equipo de producción y encargado de los servicios de protección de la cita desde hace 18 años. Dice que la primera vez que vivió el festival vio actuar en Las Veletas a Peter Gabriel y desde entonces se metió de lleno en la maquinaria de Womad.

Desde 1993 le acompaña su amigo Chuchi (Jesús Salado) y entre ellos y el resto de los servicios de protección civil, Conyser y voluntarios de Dya, Ara y Cruz Roja han hecho posible que en estos 19 años no haya ocurrido ningún conflicto reseñable. "En realidad es la misma gente que viene a Womad la que colabora para que esto sea una gran familia durante tres días", indica Ignacio, que en sus tiempos jóvenes fue pincha discos de Acuario y Bols. Suenan las últimas notas de Seun Kuti & The Positive Force y Womad se despide. Las escobas de Conyser hicieron el resto.