Una media de mil cacereños solicita cada año el certificado de grado de minusvalía, un documento imprescindible para poder tener acceso a ciertos servicios públicos y a prestaciones económicas, beneficios fiscales y sociales existentes para los discapacitados.

Del reconocimiento, valoración y calificación del grado de minusvalía se encargan los Cadex (centros de atención al discapacitado en Extremadura), dependientes de la Consejería de Bienestar Social, de los que existen uno en Cáceres y otro en Badajoz.

En el de Cáceres se presentaron el año pasado 1.337 solicitudes nuevas, una cifra que según información facilitada a EL PERIODICO EXTREMADURA por su director, Ignacio Bravo, ha experimentado un cierto incremento.

"En los últimos años se solicitan más reconocimientos de minusvalía, lo que estimamos se debe a dos causas: una mayor esperanza de vida y un mayor conocimiento de los recursos existentes".

El porcentaje de concesiones se eleva al 74%, es decir, que una de cada cinco solicitudes que se presentan no consiguen el certificado de grado de minusvalía que se necesita para acceder a las ayudas y prestaciones. Bravo explicó, en este sentido, que la situación de minusvalía se reconoce oficialmente cuando se supera un porcentaje del 33%, "es sólo con minusvalías superiores cuando se puede acceder a prestaciones y servicios, y sólo a partir de un grado superior al 65% cuando se accede a una pensión, que hoy es de 268,78 euros al mes".

El grado de minusvalía lo establece un equipo de valoración, "por lo que es difícil que se puedan cometer fraudes, aunque ciertamente algunos intentan fingir mayor dolencia para lograr el porcentaje necesario, algo prácticamente imposible", matiza Bravo.

EN CIFRAS

El 36,5% de los extremeños discapacitados, valorados y reconocidos por los centros de base de la Consejería de Bienestar Social, residen en la provincia de Cáceres. Son, en total, 28.699 personas, de las que el 65% (18.613) son mujeres y el 35% (10.086) hombres, "la prevalencia de mujeres con discapacidad duplica a la de los hombres".

Respecto a la edad, los datos reflejan que la mayoría, un 50,8%, de los discapacitados cacereños que obtienen el reconocimiento de minusvalía son mayores de 65 años; el 46,4% tienen entre 14 y 64 años; y la minusvalía en la etapa infantil es muy reducida, pues sólo un 2,5% de los reconocidos tienen menos de 14 años.