Centró ayer las conversaciones de los comercios cacereños y fue la pregunta del día en todos ellos: "¿Qué compraría con 6.000 euros?". La respuesta la daban los clientes, que son los beneficiarios de esta iniciativa tan novedosa en Cáceres que ha resultado ser un auténtico éxito. La tele de plasma es, sin duda, el sueño de muchos cacereños. Lástima que ninguno de ellos pueda hacerlo realidad, al menos en este sorteo, en el que la condición fundamental es gastar en cada comercio entre 100 y 180 euros y, lógicamente, el precio de la pantalla plana supera con creces esta cifra.

Los viajes se sitúan como segunda preferencia en este sueño consumista. El sueño, esta vez, tampoco podrá cumplirse puesto que en el sorteo no ha participado ninguna agencia de viajes. Pero soñar no cuesta dinero "y puestos a pedir, pedimos lo que sea, hasta comprarme un piso", aseguraba entre risas la clienta de una ferretería cacereña.

Sueños aparte, lo cierto es que comprar --esta vez-- tampoco costará un céntimo al ganador. Y si no es la tele de plasma ni el viaje a Egipto, sí hay otros sueños, mucho más cercanos, que el ganador del sorteo podrá cumplir: la ropa, por ejemplo, marca tendencias en los gustos de los ciudadanos. "Me iría a Pintores y allí echaría un vistazo y, por supuesto, ropa seguro que cae", explicaba otra cliente consultada.

Y junto a la ropa, la decoración también arrasa. Amueblar el piso está más cerca de un bolsillo cacereño. El nombre de ese bolsillo hoy, por fin, se desvela.