Con un medallón al cuello con la fotografía de su marido fallecido y su hija asesinada, Ascensión Moreno intentaba ayer mantener la entereza y responder a las preguntas de los periodistas antes del juicio y después a las de la fiscal y abogados. "Estoy nerviosa, pero hay que pasar por esto para que se haga justicia", declaró a este diario. La mujer, que cuenta con el apoyo del ayuntamiento casareño y el colectivo Malvaluna de ayuda a maltratadas, se refirió al acusado como "un criminal" que se merece "estar en la cárcel y no en un psiquiátrico". "Me mató a mi niña y espero que le condenen a la pena máxima". Dijo que su nieta, de 16 años, estaba en tratamiento psicológico. "De loco nada, eso le gustaría a él", añadió una hermana de la víctima en alusión al acusado.