La economía cacereña sigue basándose en dos pilares: el sector servicios y la agricultura. De hecho más del 85% de los contratos que se registraron el año pasado en la provincia se sustentaron entre ambos sectores, el 56,62% en servicios y el 28,96% en la agricultura. Según el Informe de Trabajo de Cáceres que elabora el Ministerio del Interior con datos del 2017, industria escasamente superó el 5% y construcción alcanzó un 10%.

Por franjas de edad, los menores de 30 años firmaron 53.778 contratos en 2017. Representan el 29,79% de los contratos firmados en el último año. Los mayores de 45 acumulan el 32% de los contratos con 58.044. Los extranjeros firmaron 14.460 contratos y las personas con discapacidad, 2.834 contratos.

Con respecto a la estacionalidad, fueron en los primeros meses del año cuando la provincia cacereña suscribió menos contratos. Por el contrario, alcanzó los máximos valores de mayo a julio, coincidiendo con los contratos previos a los meses estivales, y anotó un descenso significativo en el último mes del año. Mayo firmó 21.583 contratos y diciembre cerca de 11.000 contratos. Esto se traduce en una media mensual de 15.000 contratos suscritos al mes durante el año anterior.

Por modalidad de contrato, la provincia cacereña, más del 88% de los que se firmaron se realizaron por obra o servicio y eventual por circunstancias de la producción. El informe de empleo de Interior refleja que los contratos por obra y servicio representan casi la mitad de los suscritos, 48,59%. Pone de manifiesto que la contratación temporal y la jornada completa siguieron predominando en 2017, no obstante, apunta que los contratos a jornada completa aumentaron y los de jornada parcial redujeron su ritmo de crecimiento.

En cualquier caso, el informe contempla que la economía provincial «seguirá creciendo» y se reflejará positivamente en el mercado laboral. No obstante, advierte que el empleo seguirá por debajo de los niveles esperados y destaca que entre las tres ocupaciones con un crecimiento más favorable se encuentran cocineros asalariados, peones de las industrias manufactureras y trabajadores de los cuidados personales a domicilio.