No ha sido una debacle, pero sí se han obtenido peores resultados que el año pasado". Ese era ayer el balance de ventas del mercadillo navideño instalado en la plaza Mayor durante el mes de diciembre y que concluyó ayer. La valoración la hacía el responsable de la empresa Sonomobel, Fernando Cardona, contratada para la instalación del mercado que ha promovido por segundo año consecutivo la Asociación de Comerciantes Ciudad Monumental.

Aunque Cardona aclaró que aún era "pronto" para hacer una evaluación definitiva, reconoció que los expositores habían detectado una reducción de la facturación respecto al año anterior, "en torno al 25 o 30%", aseguró.

CRISIS EN EL COMERCIO "No sólo ha sido en los puestos, la crisis es generalizada, en mercadillos de otras ciudades e incluso en los establecimientos de hostelería del entorno de la plaza y comercios de Pintores. Atendiendo a esa situación, se puede decir que el resultado del mercadillo ha sido razonablemente bueno", declaró.

En términos similares se expresó la presidenta de la asociación de comerciantes, Pilar Jiménez, que achacó también en parte a la crisis del sector el descenso en las ventas. Sin embargo, Jiménez destacó la importancia de esta iniciativa para atraer al público hasta la plaza Mayor.

En este sentido, apuntó que en estas fechas el número de personas que afluyen a la plaza "se triplica". "Eso ya es positivo para nosotros, más adelante se verá si ha incidido o no en el volumen de las ventas de la zona, pero a voz de pronto se puede decir que el resultado es satisfactorio".

A pesar del bajón en las ventas, Fernando Cardona manifestó "el deseo de repetir el próximo año y con ilusión". Apuntó, en este sentido, la necesidad quizás de mejorar los productos y realizar algunos ajustes de cara a esa próxima edición, como estudiar la posibilidad de trasladar a la zona de la plaza Mayor la pista de patinaje sobre hielo si vuelve a instalarse.

La víspera de Reyes fue el último día de apertura al público. Los vendedores, venidos de diferentes puntos de España, comenzaron el jueves por la noche a empaquetar la mercancía no vendida y ayer por la mañana se iniciaron los trabajos de desmontaje de las casetas. El mercadillo, con alrededor de 30 puestos, ha funcionado durante un mes, desde el 6 de diciembre.