Si el deporte es por norma competición y lucha por ganar, ayer sirvió para que la Ciudad Deportiva se convirtiera en una fiesta para los más de 2.000 mayores y espectadores que llenaron césped y gradas con motivo de la VI Convivencia Deportiva Para Personas Mayores de Extremadura, organizada por las Consejerías de Bienestar Social y de Cultura.

En silla de ruedas, por su propio pie o ayudados por sus monitores, el campo de juego y la pista de atletismo sirvieron a estos deportistas de avanzada edad para carreras, el lanzamiento de peso o de jabalina y hasta en la pelea por ser los mejores tirando de la soga. Uniformados para la ocasión, la ceremonia tuvo ambiente de miniolimpiada: los hogares, residencias y centros de día venidos de diferentes puntos de Extremadura desfilaron al ritmo del speaker Tete, portaron la antorcha y escucharon el himno regional ante las autoridades.

Con la idea de que la actividad física es clave para combatir el paso de los años, Manuel Martínez Dávila, director general de Deportes, avanzó ayer que la Junta perfila un nuevo programa para la práctica del deporte con destino a los mayores de 60 años con riesgo de padecer diabetes o hipertensión.

Contra la dependencia

El encuentro de ayer, en el que el Cimov ofreció la comida, es el colofón a las actividades que Bienestar Social realiza para mayores durante varios meses al año con programas deportivos en sus pueblos de origen. Juan Carlos Campón, director general de Servicios Sociales, resaltó también que estas actividades deportivas contribuyen a prevenir también situaciones de dependencias "porque les permiten estar activos". La demostración de esfuerzo a diferentes niveles que hicieron fue la mejor demostración.